Una nueva investigación sobre las inversiones en Cuba y Venezuela durante los mandatos de Dilma Rousseff y Lula Da Silva fue solicitada por el actual presidente de Brasil, Jair Bolsonaro. El encargado de llevar a cabo dichas pesquisas será Gustavo Montezano, jefe del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES).
Cuba, Venezuela y Mozambique, deberían al BNDES más de 510 millones de dólares, si se tienen en cuenta las tasas de cambio actuales. Dicha institución bancaria jugó un rol esencial en los proyectos de cooperación que llevó a cabo Lula Da Silva.
Montezano está a cargo del BNDES después de que Bolsonaro amenazara con despedir al expresidente de la institución, Joaquim Levy, por ofrecerle un cargo importante a un funcionario que pertenecía al Partido de los Trabajadores.
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