La madre de un joven detenido por las protestas antigubernamentales del 11J, específicamente las ocurridas en la barriada habanera de La Güinera, lamentó la extensa condena que las autoridades habían impuesto a su hijo.
Migdalia Gutiérrez Padrón explicó a la prensa independiente cubana que el pasado 11 de mayo tuvo lugar un juicio de apelación de su hijo Brusnelvis Cabrera Gutiérrez, quien había sido sentenciado a 15 años.
Ella tenía esperanzas de que la condena fuese rebajada, pero la condena quedó apenas en cinco años menos, por lo que ahora deberá pasar una década tras las rejas. En declaraciones a 14yMedio, Gutiérrez destacó el papel de los abogados defensores en el caso de su hijo, “pero los fiscales culparon a los muchachos y trataron de hacerles parecer delincuentes”.
“Tuve mucha apretazón en el pecho por tanta injusticia que se estaba cometiendo ahí contra ellos y en especial contra mi hijo”, expresó. La madre insiste en que hubo un error en un juicio anterior y esperaba que reconsideraran la petición fiscal.
En esa ocasión, presentaron como material incriminatorio la imagen de un joven sobre una motocicleta que, agitando su brazo, convocaba a otras personas a sumarse a la manifestación. Esta “evidencia” le bastó al tribunal para condenarlo a 15 años de cárcel, algo cuya veracidad la madre niega. “El muchacho de la foto no tiene tatuajes en el brazo y mi hijo lo tiene lleno de tatuajes”, enfatiza.
Pero el proceso de apelación no favoreció al joven de 21 años. “Se sintió tan mal cuando escuchó la condena a diez años que le pedí que me pusiera a alguien que estuviera cerca de él para decirle que lo ayudara a procesar la información”, refirió la madre.
Hoy Cabera se encuentra en la prisión del Combinado del Este, en La Habana, la mayor del país. Fue sentenciado por el supuesto delito de “sedición”, una figura bastante empleada para condenar a los manifestantes de los días 11 y 12 de julio de 2021. “Le dije que iba a hacer hasta lo imposible por luchar por su libertad y no pude. Ahora no me quedan muchas esperanzas, se me han caído bastante”, confiesa Gutiérrez.
“Como madre de él no voy a dejar de luchar. Yo soy su madre y soy su voz. Aquí mismo en La Güinera varios de los condenados por las protestas, y que son menores de 21 años, han recibido, tras la apelación, la posibilidad de ir a campamentos de régimen abierto, pero a mi hijo le dejaron diez años con internamiento en prisión”, expuso.
“Me siento destruida por esa decisión que ha tomado el Tribunal, porque mi hijo tiene que pasar diez años en prisión”, confiesa. Cientos de cubanos fueron encarcelados tras el estallido social del 11J. Las manifestaciones de La Güinera, uno de los barrios más humildes de La Habana, fueron de las más trascendentales. Desde allí, se reportó la única muerte reconocida oficialmente durante las protestas.
Las penas de los más de 100 manifestantes enjuiciados por participar en las protestas de la Esquina de Toyo y La Güinera, oscilaron entre los cuatro y 30 años de prisión. El Tribunal Provincial Popular de La Habana, sostuvo que “los jueces actuantes tuvieron en cuenta el grado de participación, las condiciones personales de los implicados, así como la gravedad, lesividad y violencia de los actos cometidos”.
Un video filtrado recientemente, donde aparece el presidente del Tribunal Supremo de Cuba (TSP), demuestra la parcialidad del sistema judicial en la isla para favorecer al régimen comunista.