Tras salir a la luz documentos desclasificados de la Agencia Central de Inteligencia sobre el crimen de Barbados, el director de cine, dramaturgo y guionista cubano, Juan Carlos Cremata Malberti, cuyo padre murió en el atentado, se refirió a las palabras de Fidel Castro el 6 de junio de 1976, apenas cuatro meses antes de que cayera el avión, por las que cree que Castro “sabía lo que venía y no lo paró”.
Entonces, durante un acto por la creación del Ministerio del Interior, Castro aseguró: “Si el Estado Cubano se dedicara a hacer terrorismo, y a responder con terrorismo a los terroristas, seríamos eficaces terroristas. El hecho de que la Revolución Cubana nunca ha aplicado el terrorismo, no quiere decir que renunciemos a ello. Lo advertimos”.
Entrevistado por el periodista Ernesto Morales para CubitaNOW, Cremata indicó que “el cubano tiene una capacidad impresionante de olvido” y que Castro “ya estaba maquinando algo con el terrorismo”, no sin recordar que en el avión iban cinco diplomáticos norcoreanos de los que nunca se habló.
Para el cineasta, a Castro pudo haberlo tomado por sorpresa o no el atentado, pero, “¿qué le costaba sacrificar a 73 personas si con eso se montaba en un carro del que no se ha bajado todavía, que es la guerra contra el terrorismo? O sea, como víctima del terrorismo. Fidel hizo el perfecto negocio contra el terrorismo, tanto, que engañó y convenció a todo el mundo de que nosotros éramos víctimas”.
Cremata, que cree que “me destinaron honrosamente una sección de la UCI (Universidad de Ciencias Informáticas)”, aunque “por lo que estoy diciendo no recibo ni un centavo”, dejó claro que en Cuba nunca se desclasificarán documentos, como sí ocurre en Estados Unidos.
Al año de morir su padre, rememoró el artista, “empezó un circo, circo que no se ha acabado”, el del “continuo volver a la muerte, al homenaje, al velorio. Es una oda a la muerte”. Es “un crimen horroroso”, “pero solo Dios sabrá” quién puso la bomba “porque no hay nada claro sobre eso”. “Quien mate en nombre de una idea, cualquiera que ésta sea, es un asesino”, resaltó Cremata, quien no ha matado “absolutamente nada” y a quien le han matado “absolutamente todo”.
“¿Quién salió beneficiado con todo esto a costa de este dolor? Yo soy contrarrevolucionario y antirrevolucionario gracias a la Revolución”, aseveró antes de denunciar que a su única hija y a su madre “no las mataron directamente, pero las mató ese sistema de mierda, injusto, inhumano, que acaba con la gente”.
Al respecto, recordó que el dolor por la pérdida de su hija no tiene cura y no acepta consuelo.Era una persona “totalmente sana” que “murió de la noche a la mañana, sin una enfermedad, sin un accidente, sin un dolor de cabeza, sin un catarro”. Murió después de convulsionar, de noche, sin poder llegar a un hospital y sin que hubiera una investigación médica.
De igual forma, añadió que “es curioso que la gente me hable del dolor de mi padre como si tuvieran más dolor que yo”. “Hay solo respeto por los héroes del pasado, pero no por los vivos del presente”, indicó.
Pero, “desafortunadamente para el Gobierno cubano, la historia ya no la escriben los vencedores. Ya hay redes sociales, hay opiniones, y todo el mundo viendo. Yo tengo que hacer valer mi opinión, mi experiencia, mi vivencia personal, sin ganar un centavo y con el dolor de la total orfandad”, argumentó.
“No me interesa vivir. Yo estoy muerto. Yo vivo sin ilusiones, con la única finalidad de que todo el ejercicio de mi talento vaya destinado a desmoralizar, a desprestigiar, y a hacer saber que ese sistema es una dictadura”, dijo, al tiempo que aseguró que no acepta críticas ni consuelo.
En tanto, el director de ‘Viva Cuba’ precisó que ahora no hace largometrajes, sino memes con los que busca educar a la gente del “establo” en que se ha convertido su país, “que va cada vez más para atrás, con una historia llena de mentiras”.
“Fidel era un especialista en virar la tortilla. La viró magistralmente porque además era un dramaturgo. Yo estudié teatro y cine, sé lo que es manipular”, afirmó antes de recalcar que “Fidel Castro manipuló nuestra historia. Se maquillaba cada vez que salía a escena. Era un genio, un showman”.
Sobre la misma cuerda, se refirió al desembarco del Granma, del cual quedaron 12 hombres, como los apóstoles; o a la batalla de Playa Girón, que quisieron venderla como la primera victoria del imperialismo yanqui en América, cuando allí pelearon “cubanos contra cubanos”. “Nunca entró el ejército norteamericano. Incluso la foto de Fidel tirándose del tanque es preparada”, detalló.
Perteneciente a una generación a la que adoctrinaron con muñequitos rusos y prohibiciones, Cremata consideró en igual sentido: “Si crees que Camilo Cienfuegos falleció en el mar, ¿por qué no puedes creer en Santa Claus?”.
“El gobierno cubano vende la figura de Mariana Grajales como la duna madre”, pero, “¿qué madre manda a su hijo a la guerra?”. De hecho, subrayó, “la propia Mariana es la justificación del Servicio Militar Obligatorio, que es trabajo esclavo, es esclavitud”.