En un emotivo giro durante su presentación en Miami, la actriz y humorista cubana Aly Sánchez, conocida por su personaje de Migdalia Rondón, interrumpió el libreto para compartir un mensaje sincero con la comunidad cubana que la ha apoyado a lo largo de su carrera. El espectáculo, que usualmente se caracteriza por el humor, fue el escenario donde Aly dejó de lado la comedia para reflexionar sobre el rumbo de la comunidad cubana en el exilio, especialmente en tiempos de cambios políticos y sociales en los Estados Unidos.
La reflexión surgió luego de que una fanática se acercara al escenario para contarle a Aly que había asistido al show tras haber cruzado la frontera hacia Estados Unidos. El relato de la mujer conmovió profundamente a la humorista, quien confesó en sus redes sociales: “Lloré un poco, pero me hace muy feliz poder ser una ayuda para que olvide el momento que está pasando”.
Sin embargo, la emoción del encuentro dio paso a una reflexión más profunda sobre la situación de la comunidad cubana en el exilio. Aly, con la voz de quien ha experimentado las complejidades del destierro, cuestionó: “¿En qué momento cambiamos como comunidad? ¿Cómo dejamos de preocuparnos y ayudar a cada uno de nuestros hermanos que llegan?” Estas palabras, llenas de preocupación por el futuro colectivo, surgen en medio de una creciente polarización en la política migratoria estadounidense, particularmente después de los anuncios del presidente Donald Trump sobre la intensificación de las deportaciones masivas.
Para la comunidad cubana, históricamente unida por su resiliencia y esfuerzo, el clima actual de miedo y división representa un desafío complejo. En su mensaje, Aly Sánchez criticó duramente a aquellos que, en lugar de apoyar a sus compatriotas, celebran las deportaciones o fomentan la delación de inmigrantes a las autoridades migratorias. “¿En qué momento pasamos de defendernos como cuando Elián a poner números de ICE para chivatear y deportar al que no te cae bien?”, cuestionó, haciendo referencia al icónico caso de Elián González, que unió a la diáspora cubana en defensa de la reunificación familiar.
La humorista también lanzó una crítica directa a los representantes políticos cubanoamericanos, señalando que “El político que no responda a nuestros intereses no merece ser reelecto”. Esta frase resonó fuertemente en el contexto del debate sobre el papel de los líderes en la comunidad cubana y su responsabilidad ante la crisis migratoria actual.
Para concluir su mensaje, Aly Sánchez hizo un llamado claro a dejar atrás la “chivatería”, la envidia y el rencor, instando a la comunidad cubana en el exilio a regresar a los valores de unidad y solidaridad que siempre los caracterizaron. “No se trata solo de sobrevivir, sino de no olvidar quiénes fuimos cuando todo comenzó”, concluyó, invitando a la reflexión sobre lo que debe ser el futuro de los cubanos en el exilio.
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