La policía de Miami-Dade detuvo este miércoles al destacado expelotero cubano Oscar Macías luego de que presuntamente amenazar con un machete a otra persona en una plaza comercial de Kendall, en el suroeste del condado.
El incidente quedó captado en cámara y Macías aparece sosteniendo el arma mientras supuestamente amenazaba a alguien. Como consecuencia, fue puesto bajo custodia de las autoridades en horas de la mañana, informó Telemundo.
Ahora, el expelotero, quien desde hace algunos años reside en el sur de Florida, enfrenta diversos cargos por agresión agravada con un arma mortal, resistirse al arresto con violencia e invasión de propiedad, señalaron fuentes oficiales.
La presunta víctima pidió no ser identificado y calificó de “loco” y “agresivo” a Macías. “El señor está loco y es agresivo y viene aquí a amenazar a la gente, a golpear a todo el mundo, a caerle a machetazo a todo el mundo y a buscar problemas. Es un drogadicto, un pelotero de la calle, de Cuba y por poco me mata ayer”, denunció.
Uno de los testigos, corrobora las afirmaciones anteriores. “Yo estoy parado aquí y él vino solo a amenazarme y de buena a primera por poco nos mata. Él quería matar al primero y al primero que tocó fue a mí”, pero “la policía vino y se desapareció y hoy lo cogieron”.
Una empleada del establecimiento aseguró que Macías había regresado al lugar “como si nada”. Un suceso reciente ocurrió en la cuadra 12700 de la calle 88 en Kendall. Hasta allí acudieron unidades de la policía de Miami-Dade, poco antes de las 6:30 a.m. del jueves, debido a la presencia de un sujeto que caminaba por el estacionamiento armado con un machete, mientras gritaba obscenidades.
“Nuestros oficiales pudieron desarmar al sujeto y detenerlo sin más incidentes”, informó la policía. “Cuando salimos de nuestros vehículos, el acusado recibió fuertes órdenes verbales para que sacara las manos de los bolsillos. En respuesta a nuestras órdenes, el acusado se levantó la camisa, metió la mano en la pretina de sus pantalones cortos y sacó un machete enfundado”, detalla el informe del arresto.
Después de varios intentos de disuadirlo, los oficiales se vieron obligados a utilizar su dispositivo de control eléctrico, lo que incapacitó temporalmente al acusado. Macías Hernández enfrenta una fianza de 23 500 dólares.
Macías abandonó Cuba mediante una salida ilegal en lancha con el interés de llegar a las Grandes Ligas de Estados Unidos, pero en el país norteamericano su situación ha ido empeorando con los años luego de atravesar problemas personales con consecuencias legales.
Fuentes cercanas al exjugador dijeron que debió “cumplir una condena de cárcel tras golpear a su mujer. Su carácter explosivo se combinó con el consumo de estupefacientes, trayéndole un desenlace bien desagradable”. A su salida de prisión, su vida no logró enderezarse y no consiguió trabajo y “comenzó a transitar por un camino que muy pocos creían al enterarse de su realidad”.
Macías jugó un total de 18 series nacionales, convirtiéndose en el segunda base que más cuadrangulares ha conectado en el torneo doméstico de la isla, con 286. Su promedio ofensivo de por vida fue de 310 y su última campaña en clásicos cubanos tuvo lugar en 2003. Los expertos consideraron que la edad con que llegó a EE.UU. fue el principal factor para que no consiguiera su objetivo.
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