El periodista cubano Javier Díaz compartió un emotivo encuentro que refleja el profundo dolor que sienten los cubanos, estén donde estén, ante la tragedia que vive el país tras el paso del huracán Melissa.
Díaz relató que mientras caminaba, un hombre se le acercó para saludarlo. Se llama Faure Gutiérrez y lleva más de 30 años viviendo fuera de Cuba.
Al hablar del oriente de la Isla y de las imágenes que ha visto en los últimos días, no pudo contener las lágrimas.
“Confíen en Dios, señores, tengan fe... confíen en Dios. Ya Cuba no es Cuba”, le dijo entre sollozos. Sus palabras, cargadas de nostalgia, impotencia y amor por su tierra, conmovieron profundamente al periodista, que terminó abrazándolo.
El testimonio de Faure es el reflejo de lo que sienten miles de cubanos que viven lejos: una mezcla de dolor, desesperanza y fe. Aunque han pasado décadas fuera del país, el sufrimiento del pueblo sigue doliendo igual, sobre todo cuando la desgracia golpea con tanta fuerza a los suyos.
El huracán Melissa dejó tras su paso un panorama devastador en el oriente cubano: viviendas destruidas, comunidades incomunicadas y familias que lo perdieron todo.
Las imágenes que circulan muestran la magnitud de la tragedia y la precariedad en que muchos han quedado, sin techo ni recursos básicos.
“Los cubanos pasamos mucho trabajo en la tierra que nos vio nacer, y cuando pensamos que no podía ser peor, llega otro golpe”, comentó el usuario Bruno Rodriguez..
El periodista resaltó que más allá de la distancia, los cubanos siguen unidos por el mismo sentimiento: la esperanza de ver a su país levantarse algún día.
Porque aunque el dolor sea grande, la fe en Dios y el amor por Cuba siguen siendo el refugio más firme para quienes no dejan de soñar con una patria mejor.
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