Después de meses de rumores y apariciones públicas que confirmaron su romance, Ana de Armas y Tom Cruise decidieron poner punto final a su relación sentimental. Lo que parecía una historia de amor de película, vivida entre sets de rodaje y escapadas a lugares discretos, terminó tan rápido como comenzó.
Según confirmó una fuente cercana a Us Weekly, la actriz cubano-española fue quien tomó la decisión de separarse, alegando que “todo iba demasiado rápido” y que necesitaba un respiro.
La pareja fue vista por última vez en julio, caminando tomada de la mano por un pintoresco pueblo de Vermont, donde irradiaban complicidad.
Sin embargo, apenas unos meses después, el encanto se desvaneció. “Fue más bien decisión de Ana, porque las cosas iban muy rápido y empezó a sentirse un poco incómoda con la rapidez con la que iban”, explicó la fuente, dejando claro que la intérprete de Ballerina quiso pausar una relación que avanzaba a toda velocidad.
A pesar de la ruptura, quienes los conocen aseguran que la separación se dio en los mejores términos. De hecho, Ana y Tom no solo mantienen una buena relación, sino que planean seguir siendo amigos. “Quieren seguir siendo amigos, pero ella necesitaba dar un paso atrás”, reveló el informante, quien insistió en que la química entre ambos era “totalmente innegable”.
El tabloide británico The Sun también confirmó la noticia, señalando que ambos “se dieron cuenta de que no iban a llegar tan lejos y que estarían mejor como compañeros”. Aunque la chispa se apagó, el cariño y la admiración mutua permanecen intactos. “Todavía aman la compañía del otro y ambos han sido muy adultos al respecto”, añadió la fuente.
Y es que el fin de su romance no significa el fin de su vínculo. Ana de Armas y Tom Cruise continuarán viéndose con frecuencia, ya que trabajan juntos en la película Deeper, una ambiciosa producción que actualmente se encuentra en pausa. “Ella ya ha sido elegida para su próxima película, así que seguirán trabajando juntos”, confirmó una persona del entorno de ambos.
De hecho, fue precisamente durante los preparativos de Deeper cuando surgió la conexión entre los dos. “Pasaban todos los días juntos entrenando para las secuencias subacuáticas más intensas”, relató un miembro del equipo de producción.
“Empezó como un profundo respeto profesional y luego surgió algo más. Tom quedó completamente prendado de Ana”, aseguró.
Aunque Ana decidió dar un paso atrás en el terreno sentimental, no ha cerrado la puerta por completo. “A ella todavía le gusta mucho Tom y tienen una conexión. Ya verán cómo se desarrollan las cosas en el futuro”, comentó la fuente.
Por ahora, la protagonista de Ballerina está enfocada en sus proyectos cinematográficos, mientras que la estrella de Top Gun: Maverick sigue inmerso en su agenda cargada de rodajes. Lo que sí está claro es que, aunque su historia de amor haya quedado en pausa, el respeto, la amistad y la química profesional entre Ana de Armas y Tom Cruise continúan más vivos que nunca.
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