Una ciudadana cubana fue arrestada recientemente en Tampa, Florida, tras ser sorprendida robando productos en una tienda Walmart, según informó el periodista Ernesto Morales a través de sus redes sociales.
En el video difundido por Morales, se observa cómo la mujer es interceptada por un oficial de policía al salir del establecimiento, luego de intentar llevarse sin pagar artículos valorados en más de 800 dólares, principalmente cosméticos. La detenida, visiblemente alterada, rompió en llanto mientras suplicaba entre sollozos: “Help me, please. Help me”.
Según se escucha en la grabación, la mujer se encontraba bajo régimen de probatoria —una forma de libertad supervisada— lo que indica que ya tenía antecedentes judiciales en Estados Unidos. Durante el intercambio con los oficiales, la cubana argumentó que estaba pasando por una situación difícil, que necesitaba enviar ayuda a su madre en Cuba, y que su esposo incluso había tenido que dormir en la calle.
Sin embargo, la justificación no convenció a muchos, y las reacciones en redes sociales no se hicieron esperar. La escena, que ha sido ampliamente compartida, ha generado un intenso debate entre quienes empatizan con las dificultades de los migrantes y quienes condenan el acto como una mancha para la comunidad inmigrante.
Algunos usuarios mostraron indignación ante lo sucedido. “No siento ninguna pena por ella, siento pena por las tantas personas decentes y trabajadoras que no han podido salir de Cuba”, escribió una internauta en un comentario ampliamente compartido. Otro señaló: “Dios mío, y sabe inglés. Con ese inglés que sabe pudiera trabajar con más facilidad. No hay materia gris”.
Otros criticaron la falta de voluntad para integrarse mediante el trabajo: “Tan joven y fuerte… en vez de irse a trabajar, qué vergüenza”. Mientras tanto, algunos lamentaron el impacto negativo que casos como este pueden tener en la percepción de los inmigrantes: “Después, cuando hablan de los inmigrantes, ponen esto de ejemplo. Qué pena, qué vergüenza. Siento dolor cuando veo esto”.
Hasta el momento, las autoridades locales no han ofrecido detalles adicionales sobre el proceso legal que enfrentará la detenida ni sobre su estatus migratorio actual. No obstante, el hecho de estar en probatoria podría complicar seriamente su situación judicial y derivar en sanciones más severas, incluso una posible deportación.
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