Cuba vivirá este miércoles una nueva jornada marcada por la crisis energética: el 44 % del país sufrirá apagones simultáneos durante la tarde y la noche, justo en el horario de mayor consumo.
Así lo advirtió la estatal Unión Eléctrica (UNE), que proyecta un déficit de 1.495 megavatios (MW), muy por encima de la capacidad de generación disponible, que apenas alcanza los 2.055 MW frente a una demanda estimada de 3.550 MW. La afectación real prevista es de 1.565 MW, aunque es habitual que los cortes reales superen estas cifras.
La situación es crítica en regiones como Santiago de Cuba y Holguín, donde los cortes eléctricos pueden extenderse hasta por 20 horas diarias. En La Habana, los apagones oscilan entre ocho y diez horas, distribuidos a lo largo del día y con mayor impacto en las noches y madrugadas.
“La crisis energética se ha vuelto parte de la rutina cotidiana, con un país atrapado entre la escasez de combustible, las termoeléctricas obsoletas y una infraestructura al borde del colapso”, alertan observadores independientes.
Actualmente, cinco de las veinte unidades termoeléctricas de la Isla están fuera de servicio por averías o mantenimientos, y casi un centenar de motores de generación distribuida permanecen inactivos por la falta de combustible.
La obsolescencia de las centrales, el deterioro acumulado por décadas de explotación sin inversión sostenida y la imposibilidad de acceder a divisas para importar petróleo agravan el escenario.
El Gobierno cubano atribuye la situación a las sanciones impuestas por Estados Unidos al sector energético, pero los analistas subrayan que se trata de un problema estructural de larga data.
Desde 1959, el sistema eléctrico cubano ha estado bajo control exclusivo del Estado, lo que ha provocado un estancamiento en la modernización tecnológica y una fuerte dependencia de fuentes fósiles. Diversas estimaciones independientes calculan que serían necesarios entre 8.000 y 10.000 millones de dólares para recuperar mínimamente la red eléctrica nacional.
“Estos apagones, más allá del impacto doméstico, están encendiendo el malestar social y podrían volver a ser el detonante de protestas como las de julio de 2021, donde miles de cubanos salieron a la calle exigiendo cambios estructurales”, afirman expertos en la región.
En un país donde la electricidad ya no es un servicio garantizado, sino una constante incertidumbre, la crisis energética se transforma en símbolo del agotamiento de un modelo que no logra sostener ni lo esencial.
El dólar se dispara en Cuba tras nuevas sanciones de Trump mientras el MLC se desploma
Hace 14 horas
Estados Unidos apuesta por más internet en Cuba: ¿es posible bajo el control de ETECSA?
Hace 9 horas
Lilo Vilaplana desnuda la hipocresía del castrismo con Sandro Castro al volante(video)
Hace 17 horas