Lo que debería haber sido una muestra ejemplar de solidaridad ciudadana se ha convertido en una historia más del absurdo burocrático y la desconfianza crónica que se vive en muchas instituciones cubanas.
La reciente denuncia de padres del círculo infantil "Amiguitos de Teté" en el poblado Dos Caminos, municipio San Luis, deja al descubierto una problemática estructural: la incapacidad del sistema para respetar y canalizar adecuadamente la ayuda que llega desde su propio pueblo.
Reinier, un trabajador por cuenta propia y dueño de una Mipyme de electrodomésticos, donó 13 ventiladores a esta institución educativa.
Lo hizo movido por una razón humana y lógica: su propio hijo estudia allí y, como tantos otros, sufre el calor agobiante en aulas sin climatización. Esta donación, sin ánimo de lucro y con intención comunitaria, fue clara: él se hacía cargo incluso de la instalación.
Sin embargo, en la reunión de padres se comunicó que cada familia debía aportar 200 CUP “para pagar los ventiladores”, un hecho que no solo es contradictorio, sino éticamente reprochable.
Peor aún: cuando los padres buscaron respuestas y confirmaron con el donante que todo era gratuito, se les presionó con otro argumento igual de confuso: que el dinero sería usado para comprar cables eléctricos. ¿En qué quedamos? ¿Se paga o no? ¿Donación o recaudación forzosa?
Este tipo de acciones alimenta el descreimiento y el malestar ciudadano. Instituciones que deberían proteger a los más pequeños y apoyar a sus familias, acaban convirtiéndose en espacios donde se reciclan las prácticas opacas y las decisiones verticales, muchas veces sin rendición de cuentas.
Aquí el problema es cómo una ayuda desinteresada es deformada por una administración escolar que, en lugar de agradecer, genera presión, manipulación y cobros injustificados.
Este caso en "Amiguitos de Teté" no es aislado: es reflejo de una cultura institucional enferma, donde la falta de ética, la opacidad y el abuso de poder continúan afectando al ciudadano común. Y lo más triste: los niños son quienes pagan las consecuencias.
Fuente: Yosmany Mayeta
Ulises Toirac responde con firmeza a ataque de ciberclaria tras atención médica en Cuba
Hace 7 horas
Robo en el hospital de Artemisa termina con recuperación de medicamentos y acto oficial
Hace 6 horas