Una pareja de Colorado enfrenta cargos graves tras descubrirse que ocultaron en su casa el cuerpo de un amigo fallecido con el propósito de seguir recibiendo sus beneficios del Seguro Social. El caso ha causado conmoción en el suburbio de Lakewood, al este de Denver, donde ocurrió el hecho.
De acuerdo con el Departamento de Policía de Lakewood, James Agnew, de 55 años, y Suzanne Agnew, de 57, mantuvieron en su apartamento el cadáver de James Francis O’Neill, de 64 años, quien habría muerto entre el 10 y el 20 de diciembre de 2023 por problemas de salud. El cuerpo fue hallado recientemente bajo un colchón inflable, sin ningún tipo de protección, lo que permitió que los ocho perros chihuahua de la pareja mordieran los restos.
Según la orden de arresto, los Agnew confesaron haber tomado la decisión de no reportar la muerte con el fin de seguir cobrando la pensión mensual de O’Neill, estimada en unos 1,000 dólares. Durante un año y medio recibieron esos pagos de manera fraudulenta, hasta que la policía descubrió el cuerpo.
La investigación comenzó cuando un hermano de O’Neill denunció en junio pasado que había perdido contacto con él. Los oficiales intentaron comunicarse con la pareja, pero al no obtener cooperación, gestionaron una orden judicial que permitió ingresar al apartamento el 3 de julio. Fue entonces cuando encontraron los restos del hombre.
Los Agnew ahora enfrentan cargos por abuso y manipulación de un cadáver, además de robo y uso indebido de instrumentos financieros. De ser declarados culpables, podrían recibir hasta 10 años de prisión y multas de 10,000 dólares. La fiscalía todavía evalúa el contexto del caso, incluyendo la relación entre los acusados y la víctima, así como el posible estado psicológico de la pareja.
Aunque casos como este no son comunes, no son inéditos. En junio de este año, Jon Hallford, propietario de una funeraria en Colorado, fue sentenciado a 20 años de prisión tras descubrirse que almacenaba de forma ilegal casi 190 cuerpos en descomposición como parte de un esquema fraudulento.
También se recuerda un caso ocurrido en Galveston, Texas, en el año 2000, cuando un hombre convivió con los cadáveres de sus padres para seguir cobrando sus prestaciones de la Seguridad Social. El escándalo provocó que ese estado aprobara leyes más estrictas contra el abuso de cadáveres.
La policía de Lakewood subrayó que este tipo de delitos no solo representan un fraude financiero, sino que también constituyen una grave falta de respeto hacia la dignidad humana. El caso de los Agnew será presentado próximamente ante un tribunal, donde se decidirá su futuro legal.
Fuente: El Diario