Dos años después de su primera cirugía plástica, la actriz cubana Yía Caamaño volvió a pasar por el quirófano. La artista, de 36 años, contó esta semana en redes sociales que se realizó una segunda intervención estética, decisión que compartió a través de un video publicado hace tres días y acompañado de un mensaje en tono reflexivo.
Según explicó, esta vez optó por un implante de senos y una transferencia de grasa, procedimientos que, de acuerdo con su testimonio, asumió como un proceso meditado y no como un impulso. “Hay decisiones que no nacen del impulso, sino de la conciencia. Esta segunda cirugía llega desde un lugar de calma, información y respeto por mi cuerpo”, escribió, agradeciendo al equipo médico que la atendió.
En la misma línea, Caamaño insistió en que no se trató de una experiencia superficial ni improvisada. “Esto no es un simulacro”, afirmó, al detallar que “eligió rodearme de un equipo que entiende la estética como cuidado y responsabilidad”, una frase con la que buscó remarcar que su decisión estuvo guiada por criterios de seguridad y acompañamiento profesional.
La publicación generó reacciones divididas. Una parte de sus seguidores le envió mensajes de apoyo y buenos deseos para la recuperación. Otros, en cambio, aprovecharon para cuestionar el riesgo de este tipo de procedimientos y la presión estética sobre las mujeres. “Dios bendito, ¿hasta cuándo las mujeres estarán arriesgando sus vidas en esas tonterías y no se aceptan tal y como son? Dios las bendiga”, comentó una usuaria, reflejando una crítica que se repite cada vez que una figura pública habla abiertamente de cirugías.
La actriz ya había hablado del tema en diciembre de 2023, poco después de establecerse en Estados Unidos, cuando anunció su primera operación. En ese momento explicó que tomó la decisión porque “había cosas en mi cuerpo que ya no se podían solucionar” y recordó los cambios físicos que ha atravesado, también por exigencias de su trabajo: “He estado desde muy gordita hasta muy flaquita, también por los personajes que me ha tocado interpretar”, dijo entonces, tras someterse a una liposucción.
Con una trayectoria que incluye filmes como Bailando con Margot y telenovelas como En tiempos de amar y El rostro de los días, Caamaño mantiene una base de fans que sigue de cerca su vida personal. Entre ellos, no faltaron quienes celebraron la decisión con elogios sobre lo “guapa”, “preciosa” o “hermosísima” que se verá.
Más allá del resultado, su caso volvió a poner sobre la mesa un debate recurrente: la cirugía estética como elección personal, el riesgo médico y el peso social de los estándares de belleza.
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