Irán y Cuba han dado un nuevo paso hacia la consolidación de una alianza estratégica de 10 años en un esfuerzo por enfrentar su aislamiento internacional y las severas crisis económicas que ambos países atraviesan.
Altos representantes de ambas naciones se reunieron en Teherán para la 19ª Comisión de Cooperación Económica, donde discutieron temas clave relacionados con tecnología, biotecnología y colaboración económica. Este encuentro refleja el interés mutuo en construir una relación más sólida, especialmente frente a las sanciones impuestas por Estados Unidos, que ambos países consideran un obstáculo para su desarrollo.
Irán enfrenta una crisis energética y financiera sin precedentes. Su moneda, el rial, ha alcanzado un mínimo histórico, y el déficit diario de gas natural ha obligado al cierre de escuelas, fábricas y oficinas. Por su parte, Cuba atraviesa la peor crisis económica desde la llegada al poder del régimen castrista hace más de seis décadas, agravada por sanciones internacionales y una economía debilitada.
Ambos países, incluidos en la lista de Estados patrocinadores del terrorismo por EE.UU., han encontrado intereses comunes en su rechazo a estas sanciones. Cuba ha recibido un pequeño alivio al ser removida parcialmente de la lista de naciones “que no cooperan plenamente” en temas antiterroristas, lo que podría facilitar nuevos acuerdos con Teherán.
Uno de los pilares de esta alianza emergente es la colaboración tecnológica y científica. En agosto, instituciones de investigación de ambos países participaron en la Convención sobre Armas Biológicas en Ginebra, destacando las dificultades que enfrentan debido a las sanciones. Además, empresas tecnológicas iraníes tienen previsto participar en una exposición en La Habana, lo que subraya el interés de ambas partes en diversificar su cooperación.
En el ámbito biotecnológico, Irán y Cuba ya colaboran en la producción de vacunas, extendiendo estos esfuerzos a países como Mali y Uzbekistán. Este tipo de colaboración se presenta como una herramienta clave para contrarrestar las restricciones internacionales.
La aproximación de Irán hacia Cuba también coincide con un momento de vulnerabilidad para Teherán, que ha visto debilitada su posición en Medio Oriente debido a factores como el desgaste de sus aliados en la región y los ataques de Israel a su infraestructura. Además, Irán busca diversificar sus alianzas internacionales, especialmente ante la incertidumbre de su relación con China, que ha mostrado signos de enfriamiento.
Aunque esta alianza tiene un fuerte potencial estratégico, quedan preguntas sobre su alcance real y si podrá igualar la profundidad de las relaciones que Irán ha construido con Rusia. Por ahora, ambos países parecen enfocados en fortalecer su posición geopolítica y buscar maneras de resistir la presión de las sanciones internacionales.
En medio de crisis profundas y desafíos externos, esta asociación refleja la voluntad de Irán y Cuba de encontrar socios estratégicos que les permitan sortear las dificultades económicas y políticas que enfrentan.
(Con información de Infobae)
Pedro, se viene el dólar a 500 en Cuba: Esta gente ni con una brújula encuentra el rumbo
Hace 3 días