Loidel Chapellí Jr. es el primero de los 12 peloteros cubanos que abandonaron la delegación nacional del Mundial Sub-23 en México, en firmar con una organización de las Grandes Ligas de Béisbol (MLB) en Estados Unidos.
El joven de 20 años, quien se desempeña como jardinero, consiguió firmar con Chicago White Sox, lo cual se hará oficial en los próximos días, según fuentes cercanas citadas este miércoles por el periodista deportivo Francys Romero.
El acuerdo quedó pactado por un bono de $ 500,000 dólares y entra en el actual período internacional, detalló Romero en su blog. A los Chicago White Sox le restaba un presupuesto de cerca de medio millón de dólares y han decidido invertirlo todo en el prometedor talento cubano, apuntó.
Chapellí Jr. es, junto al lanzador Ubert Mejías, el único integrante de la selección que había participado en los Mundiales Sub-15, Sub-18 y Sub-23, y había jugado con anteriodidad en la Liga Mexicana de Béisbol el año pasado.
El acuerdo con los White Sox tuvo lugar hace algunas horas en Mérida, Yucatán, donde el antillano es representado por ThOR Representaciones. Romero destaca que se trata de un jugador con una extraordinaria trayectoria que llegó a ser Novato del Año en Cuba.
En el Mundial Sub-15 de 2016, resultó elegido el MVP. Durante la campaña 2019-2020 con los Toros de Camagüey bateó .288 en 61 juegos. En la siguiente, logró un salto de calidad con un desempeño de .317/.442/.496, 20 dobles, dos triples, siete jonrones y 50 boletos en 73 juegos.
De igual modo, en el certamen mundial, el bateador zurdo compiló .304 de average (7 hits en 23 turnos), un triple y 4 RBI. Por ahora, se espera que el joven participe en la Liga Dominicana de Verano antes de ser asignado a las Ligas Menores y comience a abrirse camino dentro del béisbol de los Estados Unidos, explica el referido medio.
La fuga de miembros del equipo Cuba en el mundial de México, representó una marca histórica, al contarse un total 12 deserciones de peloteros en un mismo evento, la mitad del equipo que viajó al país azteca. El anterior fue de nueve, en 1996, en varios torneos.
El propio Romero dijo que la competición sería recordada como el Mundial de los “abandonos”, al acontecer 12 deserciones en apenas 12 días. La selección cubana logró el cuarto lugar en el III Mundial Sub-23, en una competición donde Venezuela se llevó el título.
El régimen comunista de La Habana culpó a Estados Unidos de incentivar las fugas de peloteros cubanos, luego de la anulación de un acuerdo entre la Federación nacional y la MLB por la anterior administración de Washington, a cargo de Donald Trump.
Según el Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER), la inhabilitación del vínculo contractual entre ambas partes, impedía a sus jugadores alcanzar sus aspiraciones profesionales por la vía natural, habilitada para el resto de los países.
En días recientes, la Federación Cubana de Béisbol confirmó que presentará una delegación al Pre-Mundial Sub-23 de Aguascalientes, México, torneo que se celebrará entre el 10 y 20 de junio y en el cual deben clasificar cuatro equipos.