Un trágico suceso enluta a la comunidad de Amancio, en la provincia de Las Tunas.
El pasado jueves 21 de agosto, el joven Miguel Tejeda perdió la vida tras recibir una descarga eléctrica mientras manipulaba una máquina Fregat en desuso.
Su cuerpo fue hallado sin vida tres días después, según informaciones publicadas en el perfil de Revolico en Amancio.
El accidente ocurrió en un contexto de creciente preocupación por las condiciones de seguridad laboral en Cuba.
En 2023, se registraron al menos 52 muertes por accidentes laborales en el país, a pesar de una disminución en el número total de siniestros laborales.
Estos datos resaltan la necesidad urgente de mejorar las condiciones de trabajo y la supervisión en los entornos laborales cubanos.
La muerte de Miguel Tejeda se suma a una serie de incidentes similares que reflejan deficiencias en la seguridad industrial.
Estos accidentes no solo causan pérdidas humanas, sino que también generan un profundo dolor en las comunidades afectadas. La familia y amigos de Tejeda lamentan profundamente su partida, mientras la comunidad de Amancio se une en solidaridad ante esta tragedia.
Este caso subraya la importancia de implementar medidas de seguridad más estrictas y de realizar inspecciones regulares en los lugares de trabajo para prevenir futuros accidentes.
Es esencial que las autoridades competentes tomen acciones inmediatas para garantizar la seguridad de los trabajadores y evitar que tragedias como esta se repitan.
La comunidad de Amancio espera que este lamentable suceso sirva como un llamado de atención para mejorar las condiciones laborales en toda Cuba, asegurando que la vida y la seguridad de los trabajadores sean siempre una prioridad.
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