La cantante y actriz Selena Gómez y el productor Benny Blanco dieron un paso importante en su relación al casarse el 27 de septiembre de 2025 en California, en una ceremonia íntima que reunió a figuras destacadas del mundo del entretenimiento. Tras haber hecho pública su relación a finales de 2023 y haberse comprometido un año después, ambos compartieron el anuncio en sus redes sociales, con Blanco dedicándole a su esposa un mensaje especial: “Me casé con una princesa Disney de la vida real”, en alusión a sus inicios televisivos en Disney Channel. Gómez, por su parte, publicó la fecha del enlace y varias fotos que capturaron el ambiente festivo de la celebración, que se extendió hasta la madrugada.
Gómez, de 33 años, lució un vestido de Ralph Lauren para la ceremonia y un look corto para el baile, mientras que Blanco, de 37, optó por un esmoquin negro clásico del mismo diseñador. Los votos fueron escritos por ambos, y la música estuvo a cargo de Mark Ronson, en una atmósfera romántica que reforzó la narrativa de “cuento de hadas” que los medios comenzaron a percibir en redes.
El evento fue cubierto por diversos medios de entretenimiento, con Vogue destacando el estilismo nupcial de Gómez, que incluyó un peinado clásico de Hollywood y un bouquet reducido, mientras que el Los Angeles Times confirmó el matrimonio con una foto reciente de la pareja en la alfombra roja.
El circular de invitados dio un toque de superproducción pop a la boda, con Taylor Swift tomando el micrófono para dar un breve discurso, y la presencia de otros artistas como Ed Sheeran, Paris Hilton, SZA, Camila Cabello, Cara Delevingne, Zoe Saldaña, Paul Rudd, Ashley Park y Finneas. También estuvieron presentes los compañeros de Gómez en Only Murders in the Building, Steve Martin y Martin Short, así como David Henrie, colega de sus días en Wizards of Waverly Place.
A pesar de los grandes nombres que brillaron en el evento, la pareja logró mantener un tono íntimo y personal, alineando su círculo de invitados con una narrativa pop global sin perder la esencia privada del día.
Este matrimonio no solo marca una etapa personal para Gómez, quien continúa consolidándose como productora y empresaria, sino también para Blanco, quien ha dado el salto de figura influyente en la industria musical a una figura pública central en el universo pop. Para ambos, el enlace no solo es un gesto de amor, sino también un capítulo que refuerza su presencia en el escenario global.