La escasez de agua en Santiago de Cuba afecta gravemente a los residentes del reparto Martí, obligados a cargar agua debido a cortes constantes. Los apagones empeoran la crisis, interrumpiendo servicios básicos. La escasez de agua se ha convertido en una verdadera tragedia para sus habitantes, que desde hace varias semanas deben cargar el agua en cubetas sin tener en cuenta la distancia a recorrer.
La situación afecta especialmente a los residentes del edificio de 18 plantas, los cuales según el reportero local Yosmany Mayeta, están obligados a cargar agua en cubos y recipientes, debido a la interrupción constante del servicio de agua potable que afecta a la zona. Inimaginable resulta la tortura de esas personas llevadas al límite de la resistencia humana.
Un video publicado por el periodista muestra que varias pipas de agua deben llenar la cisterna del edificio, pero lo cierto es que cuando no hay manguera no hay combustible para las pipas y cuando llega el agua no hay luz para elevar el líquido.
Este problema de abasto se ve agravado por los frecuentes apagones que afectan a toda la ciudad y en particular al reparto Martí. Los cortes de electricidad pueden durar hasta 20 horas consecutivas, lo que no solo interrumpe el uso de bombas de agua, sino que también dificulta las tareas diarias, como la preparación de alimentos y el cuidado de los niños y ancianos.
Aunque la situación en Santiago de Cuba es grave, el problema del suministro de agua no es exclusivo de esta región. En La Habana más de 400 mil residentes también carecen de acceso regular al agua potable, lo que se suma a la creciente crisis de servicios básicos que enfrenta el país.