En una declaración que ha pasado casi inadvertida para los grandes medios, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó que su administración asestó recientemente un golpe contundente contra instalaciones estratégicas en Venezuela, desde donde —según sus palabras— “salen los barcos”. La revelación se produjo el pasado 26 de diciembre durante una entrevista en el poco difundido podcast del empresario John Catsimatidis, acompañado por la comentarista Rita Cosby.
“No sé si leyeron o vieron que tienen una gran planta, unas grandes instalaciones de donde vienen los barcos. Hace dos noches la eliminamos por completo. Así que les dimos un golpe muy duro”, declaró Trump, sin precisar la ubicación exacta ni la naturaleza oficial de la operación. Sus palabras apuntan a una acción directa contra infraestructura clave del entramado criminal venezolano, en un contexto de creciente presión militar y económica sobre el régimen de Nicolás Maduro.
Hasta el momento, ni el Departamento de Defensa ni el Comando Sur de Estados Unidos han confirmado públicamente la operación descrita por el mandatario, pese a que ambas instancias han mantenido una comunicación activa sobre maniobras militares en el Caribe y el Pacífico oriental, en el marco de la denominada Operación Lanza del Sur. Esta falta de confirmación ha generado interrogantes sobre el alcance real y los detalles de la acción mencionada por Trump.
El The New York Times, que también se hizo eco de la entrevista, citó a funcionarios estadounidenses que señalaron que Trump se refería a la destrucción de una planta de procesamiento de drogas en territorio venezolano. No obstante, las fuentes evitaron ofrecer información adicional, reforzando el carácter opaco de la operación.
Las declaraciones encajan con el discurso reiterado del presidente estadounidense, quien ha asegurado que su gobierno no limitará la lucha antidrogas al mar, sino que avanzará con operaciones en tierra firme. Trump ha afirmado en varias ocasiones que el tráfico de drogas por vía marítima hacia Estados Unidos se ha reducido en un 94 %, y que el objetivo ahora es neutralizar el porcentaje restante mediante acciones directas.
“Las drogas han bajado un 94 %, y vamos a ir también por ese seis por ciento. Golpearlos en tierra es mucho más fácil”, ha sostenido el mandatario. En ese sentido, ha reconocido haber autorizado operaciones de la CIA en Venezuela, enviando advertencias explícitas a las redes criminales vinculadas al narcotráfico.
El mensaje hacia Maduro ha sido igualmente directo. Estados Unidos mantiene una recompensa de 50 millones de dólares por información que conduzca a su captura, y Trump ha insistido en que la mejor opción para el líder chavista es abandonar el poder. “Creo que sería inteligente de su parte hacerlo”, afirmó el pasado 22 de diciembre, antes de lanzar una advertencia aún más contundente: “Si quiere jugar rudo, será la última vez que lo haga”.
Fuente: NTN 24
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