El Ministerio de la Construcción (MICONS) reconoció este viernes que incumplió los planes previstos de nuevas viviendas durante el año 2021. Las autoridades cubanas informaron las bajas cifras en el balance anual del MICONS bajo un cartel con las caras de Fidel y Raúl Castro que decía “Revolución es construir”.
El año anterior se terminaron 18 645 viviendas, para un incumplimiento del 42 por ciento del plan. La cifra fue 39 % menor con respecto a los nuevos hogares entregados en 2020. Las limitaciones estuvieron, en lo fundamental, en el déficit de cemento, acero, áridos, materias primas de importación para la carpintería metálica, muebles sanitarios y otros artículos, informó la página oficial Presidencia de Cuba.
Según la citada fuente, los planes estatales se cumplieron al 55%, los subsidios al 20% y por esfuerzo propio se concluyeron 7481 viviendas de las 16 579 previstas. También se terminaron 14 245 acciones constructivas de rehabilitación, el 41% de las planificadas en el tercer año de la Política de la Vivienda.
“Nosotros tenemos una gran insatisfacción con el Programa de la Vivienda, que es uno de los temas que más preocupa y afecta a la población, y que siempre nos lo dicen cuando vamos a los barrios. Ya es hora de dar un cambio total a esa situación, y este balance tiene que marcar un antes y un después, el Ministerio de la Construcción tiene que asumir con todo su peso el papel rector en el Programa de la Vivienda”, dijo el primer ministro, Manuel Marrero.
“Si hemos sido capaces de inventar las vacunas para enfrentar la Covid-19, cómo no vamos a ser capaces de encontrar soluciones alternativas para la construcción de vivienda”, agregó Marrero.
Durante el balance anual del MICONS también se reconocieron otros incumplimientos. La mayoría de las producciones se incumplieron proporcionalmente a la entrega de los recursos del Balance Nacional: cemento (76 por ciento); acero (26 por ciento); madera (41 por ciento); plástico reciclable (20 por ciento) y diésel (35 por ciento).
Unas seis empresas del Grupo Empresarial de Materiales de Construcción de Cuba (GEICON) tuvieron pérdidas el año pasado y en 88 municipios se concentraron los mayores incumplimientos de las producciones.
“Los atrasos y problemas en la construcción de la vivienda también tienen entre sus causas que muchos gobiernos locales no le están prestando la atención que lleva este programa. Tenemos que convertir cada municipio en un gran productor de materiales de la construcción y a través de la ciencia y la inteligencia que hay en cada localidad, generar y producir materiales alternativos”, dijo Marrero.
El régimen cubano espera que para 2022 la producción de cemento crezca hasta 1 400 000 toneladas; las ventas al MINCIN (Ministerio de Comercio Interior) con destino a la población crecerán en todos los surtidos, y se asegura satisfacer la demanda de muebles sanitarios y enchape cerámico para las Cédulas Básicas Habitacionales (CBH) planificadas a construir.
Durante el presente año, el MICONS prevé controlar la construcción de 37 991 viviendas (sector estatal: 15 721; células básicas habitacionales: 11 786; por esfuerzo propio de la población: 10 484). Así como, se prevé rehabilitar 14 697 viviendas y conservar 21 087, agregó la citada fuente.
La corporación cubana CIMEX S.A., parte del conglomerado militar GAESA, reconoció este viernes que vende cemento y otros productos vencidos por la creciente crisis económica en Cuba.
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