Una familia de pescadores cubanos de Cárdenas está pidiendo ayuda para recuperar su embarcación, que según denuncian fue robada y utilizada en una operación de tráfico humano hacia Florida. El caso salió a la luz gracias a un reportaje exclusivo de Noticias 23, que conversó con los afectados.
El bote, considerado la principal fuente de sustento de la familia Ruano, habría zarpado el 1 de septiembre desde Cuba sin autorización de sus dueños. Días después apareció en los Cayos de Florida, vinculado a la llegada de un grupo de migrantes.
“Nosotros fuimos víctimas de un robo, nos quitaron algo muy valioso para nuestra familia porque es nuestro medio de vida. Muchas personas aquí en Cárdenas dependen de lo que se pesca con ese barco”, declaró a Noticias 23 la esposa de Edel Ruano, propietario de la embarcación. Según explicó, el bote había sido construido por su esposo con sus propias manos.
Las autoridades del condado de Monroe informaron que el pasado 5 de septiembre fueron arrestados Jesús Herrera Belett, de 38 años, y Jesús Medina Esquijarosa, de 56, presuntamente vinculados al traslado ilegal de unos diez migrantes desde Cuba a los Cayos.
De acuerdo con los registros policiales, Herrera Belett habría sido el capitán de la embarcación, mientras que Medina Esquijarosa actuó como conductor. Ambos enfrentan cargos relacionados con tráfico humano y permanecen detenidos a la espera de su audiencia, programada para el 7 de octubre.
La esposa de Ruano aseguró que no le sorprende la implicación de Herrera Belett, a quien señala como responsable de un robo similar ocurrido tres años atrás, cuando se habría apropiado del barco de un familiar y lo utilizó para llegar a Estados Unidos, donde luego se estableció como residente.
Actualmente, el barco se encuentra bajo custodia de la Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida (FWC, por sus siglas en inglés). Sin embargo, para poder recuperarlo, la familia tendría que cubrir costos que aseguran no poder afrontar.
“No queremos vernos envueltos en temas políticos. Solo pedimos a las autoridades y a nuestros amigos y familiares en Estados Unidos que nos ayuden. Nos piden dinero para sacar el barco de donde está, y nosotros no contamos con esa cantidad”, explicó la esposa del pescador.
La familia insiste en que la devolución del bote es vital para su sustento y para la comunidad de Cárdenas. “Que se haga justicia y que podamos tener de vuelta nuestro barco aquí en la ciudad”, concluyó.
Fuente: Univisión Miami