El nadador Jordan Crooks, de las Islas Caimán, marcó un día histórico en la natación mundial al romper en dos ocasiones el récord mundial de los 50 metros libre en piscina corta. Durante las competencias del Campeonato Mundial en Budapest, Crooks no solo superó la marca anterior, sino que se convirtió en el primer nadador en la historia en bajar de los 20 segundos en esta prueba.
En las series clasificatorias, Crooks registró un tiempo de 20.08 segundos, superando el récord de 20.16 segundos establecido por el estadounidense Caeleb Dressel. Más tarde, en las semifinales, Crooks asombró al mundo al establecer un nuevo récord de 19.90 segundos, un logro sin precedentes que consolida su lugar en la élite de la natación.
El joven atleta de 22 años, ganador de esta misma prueba en Melbourne 2022, mostró una velocidad impresionante, a pesar de realizar una vuelta ligeramente más lenta en 10.35 segundos, cinco centésimas más que su primer récord del día.
En las series, Crooks lideró con claridad, seguido por el estadounidense Jack Alexy (20.51 segundos) y el brasileño Guilherme Santos (20.59 segundos). Mientras tanto, el surcoreano Yuchan Ji logró avanzar a la final igualando el récord asiático con 20.80 segundos.
La final, que se disputará este domingo, promete ser emocionante, con Crooks como el favorito indiscutible tras su histórico desempeño. Este logro no solo resalta su talento excepcional, sino que también marca un antes y un después en la historia de la natación, rompiendo barreras que parecían imposibles de superar.
Crooks ha demostrado que los límites están para ser desafiados, y su hazaña será recordada como un hito en el deporte.
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