El director nacional de Epidemiología de Cuba, Francisco Durán García, desmintió esta semana los rumores sobre presuntas muertes en Matanzas a causa de los brotes virales que golpean a la provincia y buena parte del país.
Durante su habitual actualización semanal, el funcionario aseguró que no se han reportado fallecimientos asociados a estos eventos epidémicos y que, aunque los servicios sanitarios se encuentran “bajo fuerte presión”, “no han colapsado”.
Durán precisó que actualmente circulan tres arbovirosis en el territorio nacional:
Dengue, con presencia sostenida en gran parte del país;
Chikungunya, detectado inicialmente en Matanzas y en expansión dentro de esa provincia;
y Oropouche, cuya incidencia muestra una tendencia a la baja.
“Hasta el momento se reportan cuatro pacientes hospitalizados con dengue: tres graves y uno crítico”, detalló el epidemiólogo, quien recordó que no existe un tratamiento específico para estas enfermedades y recomendó mantener la hidratación, usar analgésicos y acudir al médico ante señales de alarma.
En cuanto a la distribución territorial, el dengue mantiene transmisión activa en 12 provincias, 36 municipios y 44 áreas de salud. El virus Oropouche, aunque en descenso, se encuentra presente en 12 provincias, 26 municipios y 31 áreas, mientras que el chikungunya continúa expandiéndose en Matanzas, donde la demanda de atención médica se ha disparado, aunque sin víctimas mortales, según las cifras oficiales.
Matanzas sigue siendo el epicentro del brote, especialmente los municipios de Cárdenas y Santa Marta, donde los vecinos reportan fiebre alta, vómitos, diarreas, cefaleas e inflamaciones. Todo esto ocurre en medio de deficiencias en la recolección de basura, escasez de medicamentos y falta de reactivos diagnósticos.
Ante la magnitud de la crisis, el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) ha trasladado médicos y enfermeros de otras provincias para reforzar la atención sanitaria en la zona, mientras se implementa un plan intensivo de control epidemiológico. Este incluye mapeo de áreas de riesgo, movilización comunitaria y apoyo de brigadas nacionales en los hospitales y policlínicos.
Durán destacó que el éxito del control vectorial depende tanto del trabajo institucional como del compromiso ciudadano, e instó a la población a usar abate en los depósitos de agua, eliminar criaderos de mosquitos y mantener la limpieza doméstica.
“Las lluvias y el calor favorecen la proliferación del mosquito, y por eso necesitamos una respuesta colectiva”, subrayó el especialista, quien insistió en que la prevención y la disciplina sanitaria son las herramientas más efectivas para contener los brotes actuales.
Aunque las declaraciones del MINSAP buscan transmitir calma, el panorama en Matanzas sigue siendo crítico, con hospitales saturados y comunidades exhaustas tras meses de precariedad sanitaria, falta de medicamentos y un deterioro ambiental que agrava la crisis.
El MINSAP traslada médicos a Matanzas ante crisis epidemiológica por dengue y chikungunya
Hace 1 día