El destacado actor cubano Roberto San Martín, dedicó, en el año 2014, unas palabras a los chicos de la agrupación cubana Buena Fe, a propósito de sus viajes a Miami, en especial a los de trabajo.
Ahora, cuando estos músicos anunciaron una próxima gira por EE.UU., sería bueno recordar las letras de San Martín.
A continuación se las reproducimos:
Sé que una vez más caeré pesado en todo el ambiente de “renovación política” que vive Miami. Sé que esta “ola” de “Buena fe” que inunda mi ciudad se molestará con mis palabras pero me da igual, como siempre, y digo lo que tengo que decir.
Nunca me gustó Buena Fe. Nunca ni cuando vivía en Cuba. Siempre me parecieron oportunistas sus canciones. Oportunistas a la poesía. Populistas, llenas de frases vacías y biensonantes. Echas para caer bien. Con ese objetivo solo, el de llegar a los más fáciles. Pero esto como todo es cuestión de gustos.
Lo que realmente me molesta de Buena Fe es su falta de coherencia. Y la ignorancia que destapan. Buena Fe como Kcho surgen siendo contestatarios de terciopelo. Sí, esos que no critican lo suficiente para ser prohibidos pero si lo justo para sonar a valientes.
Porque alguien me va a decir ahora que si al mes de su nacimiento le hubiera cantado Happy Birthday al Coma serían tan populares ahora? Si por allá por sus inicios Israel hubiera destapado este discurso comunista y cheo que lo acompaña hoy 1500 jóvenes lo seguirían en el Miami Dade County?
Voy más allá, Buena Fe es un producto con un ‘marketing’ espectacular, como el médico de la salsa (di algo para oponerme) lo triste es que este pueblo de Miami sufre tanto de nostalgia que es incapaz de ver como son manipulados por aquellos que han provocado esa nostalgia en primer lugar.
Yo soy un artista y vivo del arte y sé que el arte debería estar por encima de cualquier posición política del artista. Pero digo arte y artista. Buena fe no tiene ni de uno ni de la otra. Buena fe es una trampa. Una mentira muy bien contada. Una emboscada con resultado feliz para los emboscadores.
¿Qué la gran mayoría de los que fueron al concierto eran jóvenes? Sí. ¿Es motivo de orgullo? ¿Para quién? Para esos jóvenes que les dicen a sus padres no me importa tu vida, ni lo que has sufrido, ni los sacrificios que has hecho para que yo viva en este país y no en aquel.
¿Para esos jóvenes que eran apáticos allá y lo siguen siendo aquí? ¿Para esos jóvenes que demuestran que la “revolución” les gano la guerra a estos EEUU el día que permitieron que los cubanos entrasen a este país como perro por su casa? ¿Es de Buena Fe este intercambio cultural que lo único que hace es traer artistas de allá para acá?
Por qué no dejan hacer un concierto en la plaza de la revolución a Escape (grupo heavy) ¿Por qué no les dejan cantar Cuba Rebelión en el Karl Marx? ¡Eso sería actuar de Buena Fe! Les pueden organizar una manifestación afuera como hicieron aquí pero déjenlos actuar.
Yo mismo me brindo a organizar un concierto de Gloria Estefan, Willy Chirino, Amaury Gutiérrez, Ania Linares, Los aldeanos, Danay, Silvito el libre, los que sean y más y que les dejen cantar lo que ellos quiera en el teatro que ellos quieran y si no se llena (dejando que la gente sea libre de elegir si ir o no) pago mil dólares por butaca vacía.
No amigos (y enemigos) Buena Fe no existe. El concierto de anoche fue una batalla más ganada por “el ejército de las ideas” y todo es política en este mundo guiado por camajanes de izquierda y de derecha. Y todos los que fueron con o sin intención se prestaron a esa farsa.
Tenemos lo que nos merecemos. Una noche de música agradable no puede valer unos principios. No cuando este mismo pueblo boicoteó un concierto de Interactivo que ha sido el único grupo cubano capaz de en la tribuna abierta decir lo que nunca nadie se hubiera atrevido a decir ¡ni bajito! ¿Dónde está la coherencia Miami?
Sin más,
Revolucionariamente,
El hijo de Guillermo Tell.