Este lunes 30 de junio, la Unión Eléctrica de Cuba (UNE) ha informado de una profunda crisis en la generación de energía, con un déficit crítico que amenaza la continuidad del suministro en todo el país. Según el reporte matutino:
Disponibilidad a las 07:00 a.m.: solo 1 800 MW frente a una demanda de 3 100 MW, lo que deja un déficit inicial de 1 300 MW
Durante el horario diurno, se espera una afectación de 1 450 MW, equivalente al déficit entre la oferta y la demanda
En el pico de máxima demanda, en la tarde y noche, el déficit podría alcanzar los 1 595 MW
La UNE atribuye la crisis a múltiples causas:
Averías en centrales térmicas: fuera de servicio unidades clave (Mariel‑5, Nuevitas‑5, Felton‑2)
Mantenimientos prolongados: Santa Cruz‑2, Cienfuegos‑4, Renté‑5 no operan por mantenimiento
Limitaciones térmicas: bloquean 351 MW de capacidad
Escasez de combustibles y lubricantes: paraliza 98 centrales distribuidas (796 MW) y agrava 31 MW por falta de aceite
Aunque el país incorporó 18 nuevos parques solares, su aporte sigue siendo mínimo: produjeron 1 720 MWh, con un pico de 378 MW, insuficiente frente a las pérdidas térmicas
Para el pico nocturno se prevé la entrada de unidades menores, aportando alrededor de 195 MW adicionales. Aun así, la salida en servicio sería de solo 2 055 MW frente a los 3 580 MW de demanda, dejando un déficit de 1 595 MW.
Apagones prolongados: se espera una jornada de interrupciones constantes, con cortes que podrían durar más de 24 horas, extendidos hasta la madrugada en algunas zonas.
Crisis estructural: el sistema se tambalea entre averías, falta de mantenimiento, fallos de gestión y carencias energéticas que dificultan cualquier solución rápida.
Poca mejora real: los parques solares representan una luz tenue en medio de la oscuridad de este invierno energético nacional.
Cierra junio como uno de los meses más críticos en la historia reciente del SEN, sumergiendo a millones de cubanos en una crisis eléctrica que parece no tener fin.