Cubanos reaccionaron la víspera ante los 45 minutos de Mesa Redonda, que buscaron vincular a varios activistas de la marcha del 15 de noviembre con figuras del exilio histórico.
Rogelio Polanco, fue el funcionario del régimen encargado de la disertación y enseguida aparecieron reacciones sobre su persona, pues muchos recuerdan su participación en una fiesta de la UNEAC, celebrada en plena crisis del oxígeno en Cuba, mientras la población fallecía por falta del necesario insumo, el Jefe del Departamento Ideológico del Comité Central del Partido bailaba junto a otros dirigentes para aparentar que en la isla todo marchaba bien.
En su comparecencia de ayer, Polanco arremetió contra varios de los organizadores de la marcha del 15N y afirmó sin ninguna prueba que recibían financiamiento del gobierno estadounidense
Los cubanos recordaron que la fiesta de la UNEAC, encabezada por Polanco, fue duramente criticada debido a que se llevó a cabo, cuando varios artistas luchaban por su vida, entre ellos el legendario Adalberto Álvarez, fundador de la Orquesta que lleva su nombre, y que fallecería días después. Y el querido actor cubano Enrique Molina que lamentablemente perdería también la batalla contra el coronavirus.
Por otro lado, el discurso de Polanco, no exhibió una sola prueba que vincule un financiamiento desde Estados Unidos a los organizadores que integran el grupo Archipiélago, e incluso se valió de una grabación de una llamada telefónica de Yunior García Aguilera con Ramón Saúl Sánchez, un exiliado que el gobierno cubano acusa de terrorismo.
La conversación evidentemente editada, pone al señor Ramón conversando con García Aguilera, pero este último solo se limita a mencionar, lo que ha dicho en espacios públicos, que pretende conversar con cubanos de dentro y fuera y que todos están invitados al cambio.
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