La selva del Darién vuelve a acaparar titulares por la crisis migratoria, mientras Panamá enfrenta un escenario apocalíptico con el cruce de cientos de miles de personas.
“El año pasado, 250.000 personas cruzaron la selva del Darién en un intento desesperado por llegar a Estados Unidos. Este año, esa cifra ya alcanzó los 360.000”, dice una periodista de la prensa estadounidense con imágenes sobrecogedoras.
Un articulo del medio europeo DW retrata la crisis migratoria. Según el artículo Panamá, desbordado por la crisis migratoria del Darién: “el Gobierno panameño se siente desbordado. Y, en realidad, las cifras son alarmantes. "2022 fue un año récord, en que cerca 250.000 personas arriesgaron sus vidas atravesando el Darién, pero ya superamos ese récord. Hasta el momento, en 2023, más de 360.000 personas han realizado este recorrido, que es muy peligroso”.
Margarida Loureiro, representante adjunta de la Oficina Multipaís de ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados) en Panamá dio testimonio al citado medio de prensa asegurando que "hay un incremento sustancial de redes de tráfico y de grupos criminales disfrazados de agencias turísticas, que venden paquetes muy atractivos a gente muy desesperada, que está huyendo por persecución, por violencia generalizada de sus países, o en busca de una vida más digna para sus familias”.
Para Loureiro el problema de la gran desinformación da alas a negocios criminales. Los que se enfrascan en este camino terminan usualmente como víctimas de abusos, maltrato, robo o fraude.
" Darién es una jungla, es peligrosa, hay también grupos criminales adentro, que violan, que matan, que roban”, dice.
Según ACNUR una tercera parte de las personas entrevistadas en agosto de 2023 reportó abusos.
"Estamos hablando del 31 por ciento de 82.000 personas. Ellos lo han perdido todo, documentos, sus celulares, cualquier recurso económico. Hay muchas mujeres violadas, hay gente que muere...Las personas con las que conversamos reportaron que habían visto entre uno y 15 cuerpos en el recorrido. Los que no han visto cuerpos, han sentido el olor”, advierte la funcionaria que califica de traumático el trayecto.