El Noticiero de la Televisión Cubana expuso imágenes de los juicios contra los cubanos que se manifestaron el 11 de julio en la conocida esquina de Toyo, en el municipio 10 de Octubre de La Habana, y provocó la repulsa de los televidentes.
Fueron juzgadas 33 personas, entre ellas seis menores de 18 años, por los hechos allí ocurridos, y el proceso legal quedó visto para sentencia.
Lo que habría sido un enfrentamiento entre partidarios del gobierno y el pueblo reclamando medidas ante la crisis económica, terminó con esos acusados llevados ante la ley por “sedición” y con peticiones fiscales de más de 10 años.
El periodista Bernardo Espinosa dijo durante el reportaje que las protestas en Cuba se caracterizaron por ser “violentas”, una situación que ha sido desmentida por otros reporteros.
Luz Escobar periodista cubana fue categórica al afirmar que el “NTV miente” porque “asegura que las protestas del 11j estuvieron caracterizadas por la violencia y actos vandálicos, esto es FALSO. El denominador común de las manifestaciones, recogidas con amplitud en videos y transmisiones en vivo, fue la protesta pacífica y los gritos de libertad”, señaló la reportera.
“Ese día la violencia la pusieron estos mismos que hoy criminalizan la protesta. ¿Qué si esa violencia tuvo respuesta? ¡Sí! ¿Pero qué esperaban? Golpearon, empujaron, encarcelaron, dispararon y hasta mataron”, dejó claro Escobar.
Un familiar de una de las detenidas por esas acciones publicó un video demostrando que su hermana se manifestó pacíficamente.
“Pretenden engañar al mundo y con ello justificar las injustas y crueles condenas. Además con esto quieren enfrentar al pueblo, ellos están preparando el terreno, si las familias salen a las calles, están buscando una justificación para su violencia autorizada”, señaló otra cubana.
“Mi hermana se manifestó pacíficamente y la orden de combate de Díaz-Canel fue la que desató una ola de ataques”, dijo un internauta recordando un momento clave de las protestas en el que el gobernante en Cuba, Miguel Díaz-Canel, autorizó el uso de la fuerza contra los manifestantes.
El 11 de julio luego de regresar de San Antonio de los Baños donde trató infructuosamente de detener las protestas, el gobernante designado autorizó el enfrentamiento violento contra todo aquel que estuviera en la calle en la jornada de levantamiento popular en Cuba.
“Tienen que pasar por encima de nuestros cadáveres y estamos dispuestos a todo”, dijo ese domingo.
“La orden de combate está dada. A la calle los revolucionarios”, añadió durante la intervención que transmitió de manera íntegra la televisión cubana tras interrumpir la programación.
En el reportaje del NTV, el periodista Bernardo Espinosa afirmó también que las protestas fueron organizadas desde fuera de Cuba, y apoyadas por “agentes infiltrados” en la ciudadanía, algo de lo que no ofreció pruebas y derivó su análisis a la fuerte cobertura internacional que tuvieron los hechos, señalando que fue una “campaña mediática”.
En las protestas pacíficas de julio, murió al menos una persona después de que un oficial de la policía disparara con balas reales contra un grupo de personas desarmadas para intentar dispersarlas. En en incidente falleció el cubano Diubis Laurencio Tejeda, de 37 años y oriundo de Santiago de Cuba, herido de muerte por la espalda. Luego de que en septiembre pasado se conociera que el responsable del hecho, el subteniente de Policía Yoennis Pelegrín Hernández sería llevado a juicio, nada más se ha conocido de ese proceso.