El presidente de Estados Unidos Donald Trump volvió a incendiar el panorama político internacional al anunciar que comenzarán “muy pronto” ataques por tierra en Venezuela. Durante una reunión con su Gabinete en la Casa Blanca, el mandatario afirmó que esta ofensiva busca frenar la entrada de drogas a su país y lanzó una declaración que ya recorre titulares en todo el mundo: “Vamos a acabar con esos hijos de perra”.
Según Trump, la estrategia terrestre sería más efectiva que las recientes operaciones en el Caribe. “Por tierra es mucho más fácil, sabemos dónde viven los malos”, señaló, dejando claro que Washington está dispuesto a aumentar la presión militar sobre el régimen de Nicolás Maduro.
Pero Venezuela no fue el único país mencionado. Trump apuntó directamente a Colombia, elevando la tensión en el continente al asegurar que “tiene fábricas enteras de cocaína" y que cualquier país que opere bajo ese modelo “es susceptible de ser atacado”.
Sus palabras resonaron con fuerza en Bogotá, donde diversos sectores interpretan las declaraciones como una amenaza frontal a la soberanía colombiana. El mensaje de Trump parece expandir el alcance de sus planes militares, vinculando la lucha contra el narcotráfico a posibles intervenciones en varios puntos de la región.
El presidente estadounidense también defendió recientes acciones antidroga, como el segundo ataque a una supuesta narcolancha. Aunque aseguró que ni él ni su secretario de Defensa Pete Hegseth habían sido informados previamente, respaldó completamente al Pentágono, subrayando que estas operaciones están “salvando miles de vidas”.
Hegseth calificó a los comandantes militares como “héroes” y afirmó que la entrada de drogas por vía marítima ha caído un 91%, reforzando la narrativa de una ofensiva en marcha que, según dijo, cuenta con el total respaldo del presidente.
Este aumento de la tensión ocurre pese a los llamados recientes al diálogo. Incluso el Papa León XIV exhortó a Trump y a Maduro a evitar una escalada: “En estas situaciones sufre el pueblo”. No obstante, Trump reveló que había dado a Nicolás Maduro un plazo para abandonar el poder, que expiró el pasado viernes. La advertencia militar llega, por tanto, en un contexto en el que Washington parece concluir que la vía diplomática ha dejado de ser viable.
En paralelo, la reunión del Gabinete abordó temas internos. El vicepresidente J.D. Vance pidió “paciencia” y prometió un 2026 económico “fantástico”, mientras Trump adelantó que dará a conocer al próximo presidente de la Reserva Federal a inicios del siguiente año.
También anunció la reconstrucción del Aeropuerto Internacional Dulles y defendió nuevamente su preferencia por los autos de gasolina. Finalmente, aseguró que la frontera con México vive su “nivel más bajo” de inmigración irregular en seis meses.
Fuentes: ABC, EFE
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