El caso del adolescente Derek Rosa, acusado de asesinar a su madre en Hialeah en 2023, volvió a generar debate judicial luego de que su defensa solicitara excluir varias fotografías de la autopsia. El argumento central: las imágenes serían innecesarias para el jurado y podrían influir emocionalmente en su criterio.
Durante una audiencia realizada este martes en el tribunal de Miami-Dade, los abogados del joven —que tenía apenas 13 años al momento del crimen y hoy enfrenta el proceso como adulto— insistieron en que esas pruebas visuales no aportan elementos esenciales para comprender lo ocurrido. Las fotografías muestran las múltiples heridas infligidas a Irina García, la madre del acusado, quien fue apuñalada casi cuatro docenas de veces mientras dormía junto a su bebé recién nacida el 12 de octubre de 2023.
La fiscalía, sin embargo, defendió con firmeza la inclusión de estas imágenes. El fiscal Jonathan Borst recordó una decisión de la Corte Suprema de Florida de 1985 que autoriza la presentación de evidencia gráfica relevante en casos de homicidio, incluso si puede resultar perturbadora. Según Borst, en este caso las fotos permiten demostrar que la víctima “estaba aspirando” al momento del ataque, un detalle clave para entender la mecánica del crimen y su brutalidad.
La disputa no se limitó a las fotos. La defensa también busca impedir la presentación de fragmentos de la llamada al 911, pruebas digitales y parte del interrogatorio policial, alegando que no son pertinentes y podrían preindisponer al jurado.
Incluso salieron a relucir los polémicos chats internos entre agentes de Hialeah, donde se compartieron fotos de la escena del crimen, un hecho que generó una investigación interna. Para los fiscales, este episodio no tiene relevancia en el juicio.
Otro momento llamativo de la audiencia fue la discusión sobre la insinuación de la defensa de que el padrastro de Derek, Frank Ramos, podría ser el verdadero responsable del asesinato. La fiscalía rechazó la idea por carecer de evidencia y recordó que Ramos ni siquiera estaba en Florida durante el crimen. El juez Richard Hersch advirtió que acusaciones sin sustento no serán permitidas en el proceso.
El caso también dejó un momento singular cuando, en una audiencia previa, el juez debió silenciar el micrófono de la abogada defensora para poder escuchar directamente al joven, quien afirmó sentirse cómodo con su equipo legal. Fue la primera intervención directa de Rosa en su proceso.
Las próximas audiencias de revisión de pruebas quedaron programadas para los días 5 y 6 de enero, mientras el caso continúa captando la atención pública por su gravedad, tensiones legales y los interrogantes que aún rodean los hechos.
Fuentes: Local 10 News y Periódico Cubano
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