La víspera, en el horario de la Mesa Redonda transmitieron más de una hora, del encuentro que tuvo el designado gobernante Miguel Díaz-Canel, con un grupo de periodistas de los medios de prensa del país.
Las nuevas imágenes de ese evento, revelan declaraciones cargadas de prepotencia del designado mandatario.
En sus intervención Díaz-Canel intentó justificar su llamado al enfrentamiento entre cubanos, alegando que las manifestaciones que se desataron el 11 de julio, no eran pacíficas, llegando a afirmar que no se arrepiente de sus palabras, y nunca lo hará, a pesar que miles de cubanos le hicieron responsable de todo lo que sucedió después.
El 11 de julio tras regresar de San Antonio donde trató infructuosamente de detener las protestas, el gobernante designado autorizó el uso de la fuerza contra todo aquel que estuviera en la calle en la jornada de levantamiento popular en Cuba.
“Tienen que pasar por encima de nuestros cadáveres y estamos dispuestos a todo”, señaló ese domingo.
“La orden de combate está dada. A la calle los revolucionarios”, dijo durante la intervención que transmitió de manera íntegra la televisión cubana tras interrumpir la programación.
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El artista Javier Bobadilla analizó en su perfil en Facebook , su comportamiento: “No me importa que DC (Díaz-Canel) “se quede sin recursos en su reducido arsenal y pierda los estribos, y convoque a la guerra civil y aliente la violencia. Espera que el "pueblo" lo defienda. Su discurso fue el de un hombre acorralado, sudando por cada poro y apelando al fraticidio. Dio luz verde a la violencia civil. Habló de estar preparado para lo que sea”.