“Los extrañaremos”, dijeron varios usuarios ante la publicación de despedida La Rosa Bakery, una popular dulcería de Miami fundada por una familia de exiliados cubanos en 1968, y que llevaba más de cinco décadas sirviendo elaboraciones como pastelitos de guayaba, croquetas y merenguitos.

Situada en una de las esquinas más transitadas de Miami, la calle Flagler y la avenida 42 (LeJeune), la dulcería cerró sus puertas el domingo 23 de abril, cuando ofreció su última jornada con una invitación a sus clientes a visitarla por última vez.

El negocio era también reconocible por sus características paredes pintadas de rosado fuerte. Osvaldo y Mercedes Mayoral, de 86 y 92 años, miembros de la familia que fundó el local, permanecieron en la panadería hasta finales de 2019.

“Con mucho pesar anunciamos el cierre de La Rosa Bakery en su actual ubicación, pero agradecemos los recuerdos y el impacto que ha tenido en la comunidad y en la historia de Miami. Nuestro último día de operación será el domingo 23 de abril. Sin embargo, no te sorprendas de ver nuevamente el nombre y el logo de "La Rosa Bakery" en el futuro”, dijeron en redes sociales.

“Aprovechamos esta oportunidad para expresar nuestra más profunda gratitud a nuestros dedicados empleados y a todos los que apoyaron a La Rosa Bakery a lo largo de los años. Estamos especialmente agradecidos a los clientes que hicieron de La Rosa Bakery parte de sus vidas y a la comunidad que la abrazó como parte integral de la historia de Miami”, expresaron.

La publicación también rinde homenaje a Rogelio Mayoral, “quien comenzó a elaborar exquisitos productos horneados cuando era adolescente en Cuba y transmitió su experiencia a sus hijos”. “Después de dirigir una gran panadería exitosa en Cuba, los hermanos Mayorales (Osvaldo, Osmar, Oliverio, Otelmy y Orfilio) emigraron a Miami con sus familias en la década de 1960 y replicaron su éxito una vez más”, recuerda.

Asimismo, describen el cierre del establecimiento como “el fin de una era”, aunque “su legado seguirá viviendo en los queridos recuerdos de quienes disfrutaron de sus deliciosas ofertas y cálida hospitalidad”.

“Siempre recordaremos a la familia Mayoral, a los talentosos panaderos, y al personal de apoyo que hizo de La Rosa Bakery la mejor panadería de Miami. Sobre todo, queremos honrar la memoria de nuestra hermana, Ana Margarita Mayoral, cuya constante labor y dedicación fue decisiva para que la panadería fuera un éxito hasta su prematura muerte”, expone.

La publicación provocó centenares de comentarios, demostrando el afecto hacia un lugar de referencia para varias generaciones. “Recordaré con cariño La Rosa Bakery de mi época de niño en los años 80. También hicisteis la tarta de mi boda. Gracias por todos los recuerdos felices”, expresó una usuaria.

“Otra parte de la historia ha terminado. Gracias por todo lo que hiciste por la comunidad de Miami. Compramos muchos pasteles para nuestros familiares en su panadería. Dios los bendiga”, dijo otra.

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