Granma lanza un repelente natural en plena crisis de arbovirosis: una respuesta tardía ante el colapso sanitario
Redacción de CubitaNOW ~ sábado 15 de noviembre de 2025
Tras meses en los que los mosquitos se adueñaron del país y el acceso a repelentes quedó limitado a tiendas en divisas, el gobierno finalmente reaccionó. Y lo hizo tarde. Solo ahora, cuando el brote de arbovirosis se ha convertido en una emergencia nacional, la provincia de Granma comenzó a producir un repelente natural como respuesta improvisada a una crisis que llevaba meses gestándose.
El Laboratorio Farmacéutico Medilip, en colaboración con la Empresa de Farmacia y Ópticas, presentó un repelente “100% natural” elaborado a base de tintura de Neem y Caña Santa, según reportó la cadena estatal CNC TV Granma. Se trata de un preparado sencillo, de aplicación directa sobre la piel, que llega como si fuera una gran solución tras un periodo prolongado sin intervención estatal efectiva. Las autoridades aclararon que no debe usarse en niños menores de tres años, pero no explicaron cómo se protegerá a los más pequeños en medio de este escenario crítico.
Las imágenes divulgadas muestran dos envases, uno con precio de 40 pesos y otro de 200. Aun así, no hubo información sobre la disponibilidad real del producto para una población que lleva meses sin repelente, sin fumigación y sin un control vectorial estable. La falta de transparencia, como tantas veces, vuelve a quedar expuesta.
El lanzamiento coincide con el reconocimiento tardío de Miguel Díaz-Canel sobre la magnitud del brote, que ya alcanza a casi un tercio del país. Los hospitales muestran señales de desbordamiento, hay escasez de medicamentos y la atención resulta insuficiente para la demanda creciente. La situación epidemiológica se ha convertido en la más seria de los últimos años, pero el gobierno evitó admitirla hasta que fue imposible esconderla.
La aparición de este repelente luce más como un parche que como parte de una estrategia sólida. Pese a las advertencias de especialistas, durante meses desaparecieron la fumigación y las acciones de control, mientras los vecinos reportaban acumulación de basura, calles anegadas y fosas desbordadas. La prensa oficial, entretanto, repetía que todo estaba “bajo control”.
Ahora, el gobierno presenta un frasco de Neem como si se tratara de una solución integral. Sin embargo, aún no ha aclarado cuántas unidades se producirán, si el producto llegará a otras provincias o cómo se garantizará su distribución entre quienes realmente lo necesitan. Todo apunta a otro anuncio limitado, más cercano a la propaganda que a una respuesta sanitaria efectiva.
En medio de una crisis epidemiológica que se agravó por la inacción institucional, lo único evidente es que la población vuelve a recibir medidas tardías, improvisadas y claramente insuficientes. Cuba necesitaba intervención hace meses, no un repelente de emergencia cuando el país entero ya enfrenta las consecuencias del brote.