Las autoridades del estado de Texas han ordenado la suspensión temporal de las operaciones de búsqueda de víctimas en el río Guadalupe, debido a la amenaza de nuevas lluvias torrenciales que podrían provocar nuevas inundaciones.
La decisión fue adoptada este lunes por el Departamento de Bomberos de Ingram, que ordenó la evacuación inmediata de todos los equipos desplegados en la ribera del río, en el condado de Kerr, el más afectado hasta ahora.
Las labores de búsqueda, iniciadas el pasado 4 de julio tras el desbordamiento del río Guadalupe, no se habían detenido desde entonces. Sin embargo, ante la creciente amenaza meteorológica, se emitió una alerta por riesgo de inundaciones repentinas. "Estamos trabajando con algunos equipos y lanchas neumáticas y barcos de búsqueda y rescate por si acaso", señaló Brian Lochte, portavoz del cuerpo de bomberos, en declaraciones a NBC Dallas. La esperanza es que las tareas puedan reanudarse, si el nivel del agua lo permite.
"El estado de emergencia se mantiene en varias zonas rurales y urbanas del centro de Texas, donde el impacto de las lluvias ha sido devastador. Hasta el momento, las autoridades reportan al menos 129 fallecidos como consecuencia directa de las crecidas, aunque no se descarta que la cifra aumente una vez se reanuden los operativos de rastreo."
El gobernador de Texas, Greg Abbott, confirmó a través de su cuenta en la red social X que se han puesto en marcha operativos de evacuación y rescate no solo en Kerr, sino también en otros condados afectados por las precipitaciones como San Saba y Lampasas. Equipos de la Agencia Federal para la Gestión de Emergencias (FEMA) han participado activamente en estas labores, logrando rescatar a decenas de personas atrapadas por el agua.
Las imágenes de los rescates muestran a familias enteras siendo trasladadas en balsas por calles completamente inundadas, mientras helicópteros sobrevuelan zonas donde los accesos por tierra han quedado bloqueados. El rápido ascenso de las aguas ha convertido a esta emergencia en una de las más letales del verano en Estados Unidos.
Mientras se monitorea el comportamiento del clima, los servicios de emergencia mantienen vigilancia constante a lo largo de los tramos más vulnerables del río Guadalupe.
La población ha sido instada a mantenerse alejada de la ribera y seguir todas las instrucciones de evacuación. El retorno a las operaciones de búsqueda dependerá exclusivamente de la evolución del fenómeno meteorológico en las próximas horas.