El reconocido director musical y pianista cubano Lazarito Valdés, líder de la emblemática agrupación Bamboleo, confirmó que se quedará a vivir en Estados Unidos junto a su familia. En una entrevista para el programa La Casa de Maka, transmitido por YouTube, Valdés abordó abiertamente los motivos detrás de su determinación de establecerse en Miami, como las dificultades económicas y sociales que enfrenta el sector artístico en Cuba.
"La situación en Cuba se ha vuelto insostenible, especialmente para los músicos. Vivimos un constante desafío que limita nuestro desarrollo profesional y personal". Durante la entrevista, el director de Bamboleo reflexionó sobre el impacto de la crisis en la industria musical en la Isla y señaló que, aunque los artistas intentan mantener su creatividad y conexión con el público, las restricciones económicas y la falta de oportunidades dificultan su labor.
"Es un momento muy difícil para los músicos cubanos, tanto dentro como fuera del país", expresó Valdés. La noticia ha generado una ola de reacciones en redes sociales, con mensajes de apoyo por parte de sus seguidores, quienes reconocen el aporte de Lazarito Valdés a la música cubana. Otros dijeron que lamentan la partida del músico, pero entienden las razones detrás de su decisión.
Bamboleo, fundada en 1995 bajo la dirección de Valdés, se ha mantenido como una de las agrupaciones más influyentes de la música popular bailable en Cuba, con éxitos que han traspasado fronteras y conquistado a diversas generaciones. En 2020 Valdés afirmó que la juventud y la música cubanas se mantenían unidas a la revolución y participó en la grabación del tema ‘No te metas’, descrito por el portal web oficialista Cubadebate como la respuesta de los artistas cubanos a “las constantes provocaciones desde Estados Unidos”.
Sin embargo, ¡su discurso ha cambiado y de qué manera! Valdés ha mostrado una evolución en sus expresiones y posturas públicas, especialmente en el contexto de la situación sociopolítica de Cuba. Anteriormente, como muchos artistas cubanos que trabajan dentro de la Isla, su discurso solía ser más conservador y alineado con las posturas oficiales del gobierno cubano, evitando críticas directas al sistema.
En los últimos tiempos Valdés, al igual que otros artistas y músicos cubanos, ha comenzado a expresar su frustración y descontento con las condiciones económicas y sociales del país. Este cambio es reflejo de una tendencia más amplia dentro de la comunidad artística cubana, donde más voces se están levantando para exigir mejoras y cambios significativos.
Este giro en su discurso puede verse como parte de una respuesta al creciente malestar popular y las protestas que se han desarrollado en Cuba, especialmente las protestas del 11 de julio de 2021, donde miles de cubanos salieron a las calles para expresar su descontento con el gobierno. Artistas como Valdés, que tienen una plataforma y una audiencia considerables, están comenzando a utilizar su influencia para abogar por cambios y para visibilizar las dificultades que enfrenta la población cubana.
Afortunadamente, Lazarito Valdés ha pasado de un discurso más neutral o alineado con el gobierno, a uno más crítico y comprometido con la realidad que viven los cubanos, reflejando un cambio significativo en su postura pública. No ha sido el primero ni será el último. La unidad de la intelectualidad y los artistas en general es muy importante a la hora de poner freno a los dictámenes irracionales de la cúpula dictatorial castrense.
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