La 62 Serie Nacional de Béisbol podría verse obligada a echar mano de las pelotas Batos, mientras espera el arribo de un segundo envío de la empresa TeamMate para cubrir la escasez de esos implementos en el transcurso del torneo.
Las bolas de la marca Batos mediante un proveedor en el exterior, dijo la Comisión Nacional de Beisbol en un comunicado que replicó el diario oficialista deportivo JIT. Las mismas se emplearían en la serie solo de ser necesario, dijeron las autoridades que no revelaron la cantidad enviada a la isla.
Asimismo, la entidad gubernamental atribuye la escasez de pelotas a un sobregasto de esféricas por partido en lo que va de temporada. Hasta el 17 de mayo suman 4 207 pelotas perdidas en nuestros estadios, con los casos más graves en las instalaciones de Guantánamo, Villa Clara, Isla de la Juventud, Pinar del Río y La Habana, con promedios entre 17 y 20 por desafío.
“Las pelotas de la marca Batos tenían como destino el desarrollo de nuestro deporte en la base, aunque sigue siendo un objetivo emplearlas con una máxima calidad en la serie nacional. Lo último no excluye nuestras relaciones estratégicas con TeamMate”, señala la nota.
Marcada por numerosas renuncias, migraciones y dificultades “logísticas” de todo tipo, la actual Serie Nacional expresa a las claras el declive del beisbol en la isla, donde se considera dicho juego como deporte nacional.
La semana pasada, un periodista deportivo cubano compartió una imagen del emblemático Estadio Latinoamericano en La Habana con las gradas totalmente vacías, durante un partido de la Serie Nacional de Beisbol entre el equipo capitalino de Industriales y Granma. “A duras penas hay 100 personas en el Latinoamericano ahora mismo, contando custodios, vendedores de maní, prensa, comisarios, peloteros inhabilitados para jugar hoy y policías”, describió Aliet Arzola.
Aun con los reconocidos problemas, el régimen comunista de La Habana no descarta celebrar una segunda edición de la polémica Liga Élite de Beisbol, criticada incluso por el oficialismo debido al despliegue de recursos que supone. En abril, las máximas autoridades del béisbol nacional anunciaron que, a finales de año, debe organizarse una nueva edición del torneo, en medio de los “problemas de aseguramiento” existentes y sin posibilidades de solución.
“La idea es tratar de terminar la etapa regular en diciembre, para que los playoffs sean en enero, y luego el equipo campeón asista a la Serie del Caribe”, declaró en una conferencia de prensa el presidente de la Federación Cubana de Béisbol y Comisionado Nacional de esa disciplina, Juan Reinaldo Pérez Pardo.
“Los problemas de aseguramiento están latentes, no se resolverán, aunque ha habido mejoría de los abastecimientos de la Serie Nacional, con respecto a los de la pasada Liga Élite”, expuso. Dicha competición contó con uniformes elaborados por TeamMate, una empresa italiana de la que hay escasa información.
Las vestimentas e indumentarias tuvieron varias irregularidades en su ingreso a la isla, que incluso retrasaron el comienzo de la Liga Élite. Además, Teammate se ocupó de la confección de los uniformes para el equipo de Cuba en el Clásico Mundial de Béisbol, apodado Team Asere.
“Teammate Sport International es socio de la WBSC (World Baseball Softball Confederation). Nuestra gama de productos incluye todos los artículos necesarios para jugar al béisbol y al sófbol (pelotas, bates de madera, guantes, ropa deportiva, accesorios y equipamiento de campo). También estamos especializados en el suministro de una gama completa de artículos deportivos a las federaciones afiliadas a la WBSC para sus eventos locales e internacionales”, dice la página de la entidad fundada en 2016.
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