El activista cubano Tata Poet denunció este viernes que en La Habana no hay carro fúnebre ni ataúd para su tío recién fallecido.
"Hace algunas horas que falleció mi tío, paciente oncológico, por el cual se tuvo que hacer malabares para conseguir su sangre y que pudiese ser transfundido en varias ocasiones, entre otros desmanes, porque la potencia médica de Cuba brilla por su ausencia, y ni guantes tienen para operar a pacientes graves", dijo Poet en Facebook.
"Ahora mismo me acabo de enterar que no hay carro fúnebre, ni caja, para que sea llevado a la funeraria y que sea velado. No, no hay. Después de que hoy yo fui testigo de todo el despliegue policial, y militar que había en el parque Coyula, y todos los alrededores de la Embajada de Panamá".
El activista detalló que en los alrededores de la Embajada de Panamá en La Habana "habían más de 25 patrullas, cerca de 40 motos de la Seguridad del Estado, tres ambulancias, cinco camionetas de las avispas negras, tres camiones pipas, dos rastras enormes en donde trasladan a los presos, cuatro camiones de policía, tres ómnibus, y más de una veintena de carros del MININT (Ministerio del Interior)".
"¿Hasta cuándo es el descaro de ustedes? Hace poco leí la noticia de la niña que estuvo más de tres horas convulsionando, y que lamentablemente perdió la vida, porque la ambulancia jamás apareció. Y si continúo narrando casos similares, no terminó jamás", dijo en referencia a la pequeña Lisaira Ramírez Rodríguez, fallecida en Santiago de Cuba por negligencia médica.
"¿Hasta cuándo es el descaro de ustedes? Claro, claro, hasta que lo dejemos de permitir, pues perfecto.... Tienen dos horas para que mi tío sea llevado con su familia al velatorio. Tienen dos horas para que aparezca el carro, la caja, y todo lo necesario para que este hombre y su familia logren descansar", señaló.
Tata Poet dijo a la Seguridad del Estado, al PCC (Partido Comunista de Cuba), al Consejo de Estado, y a la madre de los tomates" que ya están advertidos.
"Les voy a calentar la funeraria de Santa Fé, les voy a calentar el hospital, les voy a calentar lo que haga falta. Ya está bueno de atropello y de descaro ya. Ya está bueno".
Varios cubanos expresaron sus condolencias a Tata Poet y contaron sus malas experiencias con la muerte de familiares y amigos.
La activista Salomé García Bacallao dijo: "Para llevar a mi abuelo a la funeraria tampoco hubo transporte, los crematorios eran solo para Covid-19 y hubo que enterrarlo en una fosa común contrario a su voluntad".
"Hace dos años perdimos al abuelo de mi ex en el Hospital Nacional. El viejo había sido combatiente de la Sierra Maestra, Girón, oficial de las FAR como ingeniero químico... al final lo dejaron morir prácticamente", dijo el dibujante Gabriel Jarquin Velázquez.
"Había ingresado con una fractura de cadera que debía ser operado en las primeras 24 horas y terminó siendo operado una semana después. Yo tuve que donar mi sangre para que lo operaran. Su hija tuvo que buscar mil contactos y nosotros dar tremendo perro berro para que le trataran. Se murió por la infección. Ese fue el día en que todo se me murió con este sistema. Ya me habían fallado, pero si así tratan a uno de los suyos... ¿qué queda para nosotros?"
"Mi padre era paciente oncológico y hace dos años y medio atrás, ya no había ni sangre, ni gasas, ni troquer, ni suero, en fin.... Imagino tu dolor e impotencia, pero por favor, coge calma, te necesitamos libre", dijo Mónica Vilches.
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