Cajas fúnebres abandonadas, en avanzado estado de deterioro han sido descubiertas en el cementerio del municipio San Luis, en Santiago de Cuba. Vecinos alarmados han documentado el hecho con imágenes y testimonios, que revelan ataúdes esparcidos en diferentes áreas del camposanto, muchos de ellos abiertos, rotos o parcialmente descompuestos. El suceso ha provocado una fuerte ola de indignación entre la comunidad.
Los residentes aseguran que esta situación lleva varios días sin que las autoridades funerarias ni el gobierno local hayan dado señales de presencia o respuesta. Las denuncias apuntan a que los ataúdes podrían haber sido desechados tras recientes exhumaciones, pero sin respetar ningún tipo de protocolo sanitario ni normas básicas de dignidad hacia los restos humanos.
Las cajas abandonadas, algunas aún con fragmentos de telas interiores y manchas visibles, generan preocupación tanto emocional como sanitaria.
Uno de los testigos declaró: “Es doloroso y hasta indignante ver cómo se trata la muerte en este país. No hay respeto ni para los vivos ni para los muertos. Esto es una violación a la dignidad humana.” La frase se repite entre vecinos que tienen familiares sepultados en el lugar, quienes claman por explicaciones y medidas inmediatas.
Las quejas no solo señalan el estado de abandono, sino también los riesgos de contaminación. El mal olor en la zona impide a muchos acercarse al cementerio, y algunos vecinos han llegado a decir que preferirían enterrar a sus muertos en sus patios antes que exponerlos a este destino.
“No se puede estar ni cerca por la peste que hay en el lugar. Si así terminarán nuestros seres queridos, entonces que nos los den y los enterramos en casa,” expresó una de las denunciantes.
Hasta el momento, no se ha emitido ningún pronunciamiento oficial por parte de las autoridades del municipio ni del gobierno provincial de Santiago de Cuba. Ante el silencio institucional, crece la presión ciudadana en redes sociales, donde se exige una investigación urgente sobre la gestión del cementerio y posibles irregularidades en el manejo de exhumaciones, restos y ataúdes.
El caso sigue en desarrollo mientras medios independientes y ciudadanos esperan una reacción por parte de los responsables. La población de San Luis demanda respeto, transparencia y responsabilidad ante un hecho que ha herido profundamente la sensibilidad de una comunidad entera.
Del perfil de Yosmany Mayeta
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