Aunque Bad Bunny no recibirá ni un centavo directo por su actuación en el medio tiempo del Super Bowl 2026, el verdadero negocio está en el “efecto post-show”. Lo que para muchos parece una presentación gratuita, para él será una jugada maestra de marketing global con beneficios que podrían superar los millones de dólares en cuestión de días.
La NFL nunca paga a los artistas que suben al escenario del medio tiempo, pero sí cubre toda la producción: sonido, luces, montaje y la puesta en escena más vista del planeta. A cambio, el artista obtiene una exposición que no se compra ni con los presupuestos publicitarios más altos. En 2024, más de 115 millones de personas vieron el show; este año, la cifra podría ser aún mayor.
Según estimaciones de Billboard, Bad Bunny genera actualmente unos 788.500 dólares semanales solo en reproducciones digitales dentro de Estados Unidos. Tras su presentación en el Super Bowl, esa cifra podría duplicarse e incluso alcanzar 1,7 millones de dólares en apenas una semana. Y no se trata de un fenómeno pasajero: artistas como The Weeknd o Rihanna experimentaron aumentos de hasta un 200% en sus ingresos por streaming durante semanas después de su actuación.
Además, el impacto no solo se mide en dinero. Cada minuto que Bad Bunny esté sobre el escenario del Levi’s Stadium el 8 de febrero de 2026 representará una expansión de su marca personal, un impulso a sus colaboraciones y una subida en las ventas de su catálogo musical, merchandising y entradas para futuras giras.
En un solo día, sus temas podrían volver al top de Spotify, Apple Music y YouTube, sumando millones de visualizaciones y seguidores nuevos.
Este show también lo consagra como el primer artista latino en solitario en protagonizar el espectáculo de medio tiempo, un hecho histórico que consolida la presencia del reguetón en la cultura pop mundial.
Y aunque su elección ha provocado críticas —como las del presidente Donald Trump, quien dijo “no saber quién es”—, cada polémica termina siendo gasolina para su éxito.
Así que sí: Bad Bunny cantará gratis en el Super Bowl. Pero su verdadero pago llegará en forma de reproducciones, contratos, fama y millones en ingresos indirectos. Porque cuando el boricua suba al escenario, no solo hará historia… también convertirá el show más grande del mundo en su mejor inversión.
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