El activista cubano Adelth Bonne Gamboa denunció que fue víctima de un asalto con arma blanca en La Habana.
“Anoche, sobre las 12 cuando me dirigía a mi casa, sufrí un asalto con arma blanca en la esquina de Buenos Aires y Magnolia. Estoy sano y salvo”, dijo Bonne en Facebook.
“Nunca había pasando por eso, nunca nadie me había puesto un cuchillo de unos 40 centímetros en mi garganta y en mi barriga. No pude correr, no pude gritar. Cuando me di cuenta el tipo ese estaba arriba de mí, apuntándome y diciendo que si corría o gritaba me iba a matar”, contó el activista.
“Con lo único que me quedé fue con mi teléfono y la ropa que traía puesta, se llevó mi gorra, mis audífonos, mi cartera con las tarjetas, el dinero y mi carnet de identidad. El teléfono no se lo pudo llevar porque estaba muy oscuro y lo logré tirar en la tierra y gracias a Dios no hizo ruido al caer al suelo. Yo estoy bien, aún con un poco de susto pero vivo y sano”.
“Cuando el tipo se va, caminando con su cuchillo en la mano, me mandé a correr para un grupo de policías que había justo a una cuadra (Vía blanca y San Julio) para que vinieran a donde yo estaba porque aún podía ver con la vista al tipo que me había asaltado”, dijo.
Sin embargo, según narró, los policías no corrieron. “Cuando llegaron a donde yo estaba ya el tipo había doblado por una esquina y lo seguí corriendo yo, porque los policía (eran más de 10) iban trotando. Yo llegué primero que ellos y ya no estaba por todo eso”.
Bonne dijo que contó el asalto con arma blanca “para esas personas que aún no creen cuando que la PNR (Policía Nacional Revolucionaria) no está para cuidar y dar seguridad. Su trabajo es muy claro y es reprimir. En eso sí son buenos”.
Ante la denuncia del activista, Zaima Alfonso opinó que “aquí no se sabe quién es más delincuente: si el propio delincuente o quienes permiten la delincuencia como nuestra ‘querida y aguerrida PNR’. Gracias a Dios que estás bien”.
“Coño, hermano, este país se ha vuelto inhabitable en todos los sentidos. La delincuencia no discrimina entre ideologías políticas, fuiste tú y estás a salvo, pero pudo ser cualquiera, y pudo ser peor”, dijo el editor Fernando Almeyda.
“¿A la gente no le importa vivir en ‘Nueva-Venezuela’? ¿Qué les importa a la gente aquí? Sobre la PNR, ya están tan desmoralizado que ni su trabajo hacen, van como fieras sobre los que disienten porque son siempre decentes... hasta el día en que alguien pierda justificadamente sus estribos ¿Y entonces qué harán? ¿Sacarán las pistolas otra vez y nos dispararán? ¿Tenemos que esperar a que lo que está a vuelta de la esquina ocurra? ¿Somos tan estúpidos como para seguir sosteniendo en el silencio a un Estado que lo único que genera es miseria y conflictos entre unos y otros. Me siento francamente desolado, primero por ti, porque aquí nadie es rico, pero sobre todo por los habitantes de esta ‘tierra maldita”, agregó.
La fotógrafa cubana Wendy Oliva González denunció que había sido asaltada a punta de pistola en La Habana. "El viernes en la noche entre las 11 y 12, mientras volvía a casa, dos tipos se bajaron de la guagua conmigo y me siguieron todo el camino a casa, fueron hablando y saludando a los que nos cruzamos en su intento de parecer de la zona".
Por su parte, Andy Rencurrel, un cubano de 30 años, fue asesinado a puñaladas el viernes en la barriada de Luyanó, del municipio habanero de Diez de Octubre.
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