Fallece preso político cubano tras intento de suicidio, según familiares
Redacción de CubitaNOW ~ martes 27 de agosto de 2024
Yosandri Mulet Almarales, un preso político de 38 años, falleció el lunes en el hospital Julio Trigo de La Habana tras un aparente intento de suicidio. Según su familia, Mulet se lanzó desde el Puente de Calabazar el viernes pasado. Después de tres días en la unidad de terapia intensiva, sucumbió a sus heridas.
Mulet Almarales fue condenado a 10 años de prisión por sedición, tras participar en las protestas del 12 de julio de 2021 en La Güinera. La fiscalía lo acusó de instigar disturbios y desafiar la autoridad estatal a través de redes sociales.
El día del incidente, Mulet debía regresar a un campamento correccional tras un permiso temporal. Según su tía política, Idalmis Salazar González, Mulet mostró señales de angustia antes del trágico suceso, dejando atrás pertenencias que debía llevar consigo.
El joven había intentado suicidarse previamente en junio de 2022 mientras estaba recluido en la prisión Combinado del Este. A pesar de sus problemas de salud mental, las autoridades judiciales rechazaron otorgarle una licencia extrapenal y lo trasladaron a un campamento de trabajo forzado en Marianao, donde tenía derecho a visitas breves a su hogar.
La organización Justicia 11J había identificado a Mulet como una persona vulnerable tras su primer intento de suicidio. Sin embargo, una segunda solicitud de licencia extrapenal presentada por sus padres fue denegada por la fiscalía, basándose en un informe del Instituto de Medicina Legal de La Habana que afirmaba que Mulet estaba apto para la prisión.
Salazar González relató que la Seguridad del Estado estaba presente en el hospital donde Mulet fue internado, aparentemente esperando la aprobación de la licencia extrapenal para informar su fallecimiento. "Pero ya él estaba muerto", afirmó.
El caso de Mulet Almarales pone de relieve la crisis de salud mental en las cárceles cubanas, donde la falta de psicofármacos y asistencia médica especializada ha sido denunciada repetidamente. La escasez de estos medicamentos no solo afecta a los reclusos, sino también a miles de cubanos que dependen de ellos para mantener su estabilidad mental.
(Con información de Martí Noticias)