El tráfico de influencias sigue erosionando la legitimidad de los títulos académicos en Cuba, una práctica que ha sido criticada por diversas organizaciones como el Observatorio de Libertad Académica (OLA). Recientemente, este organismo independiente denunció cómo el uso del poder político se ha infiltrado en el sistema académico, otorgando títulos a figuras de alto perfil sin la debida cualificación.
Una de las principales críticas se dirige hacia Lis Cuesta, esposa del presidente cubano Miguel Díaz-Canel, quien ha sido beneficiaria de altos títulos académicos a pesar de la falta de méritos científicos demostrables. Según el OLA, la participación de Cuesta en eventos académicos y la obtención de un doctorado no responde a un verdadero progreso en la ciencia, sino a un esquema de influencias que favorece a la élite gobernante.
Lis Cuesta se graduó como Doctora en Ciencias en diciembre de 2022, tras defender una tesis sobre el “Modelo pedagógico para exportación de servicios académicos en la agencia Paradiso.” El propio Díaz-Canel celebró este logro en redes sociales, subrayando su cercanía y pasión compartida por la ciencia. Sin embargo, para muchos críticos, este título refleja una distorsión del verdadero valor académico.
Leonardo Fernández Otaño, investigador del OLA, expresó su preocupación por la complicidad de instituciones clave, como la Academia de Ciencias de Cuba y el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, en la concesión de títulos a figuras políticas. “Mientras que académicos críticos son expulsados o marginados, otros, sin méritos comprobables, son elevados a las más altas distinciones,” comentó Fernández Otaño.
Un caso que ilustra esta desigualdad es el de académicas como Alina Bárbara López Hernández o Jenny Pantoja, quienes han sido objeto de hostigamiento por sus posturas críticas, mientras que a personas como Lis Cuesta se les otorgan doctorados sin que su trayectoria científica lo justifique.
El tráfico de influencias, castigado por la ley cubana con penas de hasta ocho años de prisión, se ha convertido en una herramienta de legitimación política en la academia. El OLA subraya que la concesión de grados científicos a figuras del régimen es una estrategia para consolidar el control del poder, más que un reconocimiento al mérito intelectual.
Cuesta ha participado en diversos eventos académicos, como el I Simposio de Deporte, Medio Ambiente y Sociedad, celebrado en Varadero en septiembre de 2023, donde presentó una ponencia sobre la exportación de servicios académicos en el ámbito deportivo. Sin embargo, según el OLA, su participación se caracteriza por la defensa de un discurso alineado con el oficialismo, más que por un interés científico genuino.
El otorgamiento de títulos a figuras políticas en Cuba, lejos de representar un avance en la ciencia, pone de manifiesto cómo el sistema académico se ha convertido en un instrumento para la consolidación del poder político. Esto, además, refleja la lucha interna entre el Partido Comunista y sectores del régimen, como GAESA, por el control de la influencia en la sociedad cubana.
EEUU da un paso firme al reconocer a Edmundo González como líder legítimo de Venezuela
Hace 21 horas