El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel invitó este miércoles al pueblo, desde sus redes sociales, a desfilar el próximo primero de mayo “por el heroísmo de la resistencia”, un mensaje que no tardó en ser rechazado por varios internautas.
“Los invito a encontrarnos en la Plaza el Primero de Mayo. Por el heroísmo de la resistencia y el inspirador triunfo de la creatividad colectiva, por las vacunas y los vacunados”, expresó Díaz-Canel a través de Twitter.
En redes sociales se ha estado gestando una campaña para que los cubanos no salgan a desfilar ese día en rechazo al régimen y a la crisis del país, pero se cree que desde los centros laborales y organismos gubernamentales presionan con chantajes a los trabajadores para que asistan.
“El mundo entero sabe que tú no invitas a los cubanos a la marcha. Son obligados a ir. Si realmente fuera una invitación, lleva sombrilla de sol y silla de playa para que te sientes tranquilo a esperar”, comentó una usuaria.
“Es verdad que hay que tener bastante resistencia, pero bastante para vivir en Cuba como un cubano común… porque si viviera como gobernante así si defendiera el comunismo hasta la muerte…no digo yo!!!”, expuso otro.
“Típico de un dictador, sacar un solo logro y repetirlo muchas veces hasta que las personas se olviden de todos sus problemas y todo lo que les falta, la pobreza y la miseria en que viven...en Cuba no hay motivos para ir al 1 ro de mayo”, señaló un tercer usuario, refiriéndose a la mención que el gobernante hace de las vacunas.
A mediados de mes, una periodista independiente cubana cuestionaba cómo el gobierno era capaz de organizar un desfile masivo sin ni siquiera garantizar el normal funcionamiento del transporte público.
“Mi madre se levanta todos los días a las 5:30 de la mañana para ir a trabajar y llega a las 10 am a su oficina porque no hay guaguas. Mi mamá es profesora sale a las 4 de la tarde y llega a casa a las 7 pm por lo mismo”, lamentó.
“Si no hay petróleo para ir a trabajar espero tampoco haya para el primero de mayo. Estoy hasta el moño del populismo, del absurdo, de esta pantomima. ¿Qué hay que celebrar el primero de mayo, de verdad?”, preguntaba.
El pueblo cubano sufre una de las peores crisis de las últimas décadas, con una escasez casi insólita de alimento, medicamentos y una inflación extraordinaria de los precios luego de que el gobierno adoptara la llamada Tarea Ordenamiento.
Aun así, los máximos dirigentes del país no dudaron en convocar a marchar por el Día Internacional de los Trabajadores después de dos años sin realizar el característico acto multitudinario debido a la crisis sanitaria por la pandemia del coronavirus.
En marzo, la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) convocó “a todo nuestro pueblo a una masiva jornada de movilización para celebrar el Día Internacional de los Trabajadores, presidida por el lema Cuba Vive y Trabaja, expresión de la firme e incondicional decisión de continuar consolidando nuestro Modelo Económico-Social de Desarrollo Socialista”.
La CTC anunció que la fecha se caracterizaría por “los combativos desfiles, concentraciones y actos en plazas y poblados de toda Cuba”. La convocatoria es a condenar también el embargo de Washington contra el régimen castrista, asegurando que la política estadounidense es “el principal obstáculo para el desarrollo del país y una violación flagrante de los derechos humanos”.
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