Varias cubanas denunciaron haber recibido, en los últimos días, mensajes similares presuntamente enviados por el trovador oficialista Fernando Bécquer, que en diciembre fue acusado de cometer hechos de violencia sexual.
A raíz del escándalo, Bécquer había desaparecido de las redes sociales, a las que volvió con publicaciones este mes, bajo la apariencia de normalidad. Sin embargo, la plataforma feminista YoSíTeCreo en Cuba expuso este viernes que algunas mujeres que mostraron solidaridad con las presuntas víctimas del músico, recibieron mensajes desde su perfil en Facebook.
“Si lo has recibido y quisieras tomar alguna acción al respecto, envíanos al privado la mayor cantidad de datos al respecto como links, capturas de pantalla, fecha, etc. Pedimos a las autoridades cubanas especial protección a las denunciantes, las cuales también han recibido este mensaje”, señala la plataforma.
La periodista Marta María Ramírez, especializada en temas de género, convocó igualmente a compartir los mensajes del trovador, exigiendo “protección a las denunciantes y a sus redes de apoyo también en redes sociales”.
“Hay un patrón que puede leerse en todas las declaraciones públicas de las sobrevivientes de Fernando Bécquer, acusado formalmente por al menos 5 mujeres cubanas, en Cuba”, escribió Ramírez en Facebook.
También manifestó su preocupación al conocer que el trovador tiene impuesta “una medida cautelar tan flexible que le permite seguir frecuentando sitios sociales donde antes encontraba a sus víctimas y es capaz de llamarlas en la calle, si se las encuentra”.
“Si esto no fuera ya alarmante, frente al silencio cómplice de instituciones cubanas (desde el Ministerio de Cultura de Cuba hasta la Asociación Cultural Yoruba de Cuba, Cenesex y la Federación de Mujeres Cubanas) este hombre desarrolla una estrategia en redes sociales en la que, de manera privada, escribe a personas que han mostrado su solidaridad con las sobrevivientes y a las propias sobrevivientes”, enfatizó.
Ramírez contó que Bécquer comenzó a seguirla en redes luego de hacer un comentario en que condenaba sus actos con mujeres, expuestos a través de testimonios en medios independientes cubanos.
“Que el agresor, violento, escriba a sus víctimas/denunciantes en tono amenazante, aleccionador, debía figurar en la investigación. Es demasiada la impunidad”, dijo.
“Exijo a las autoridades cubanas y a las instituciones relacionadas, en primer lugar, protección para las sobrevivientes/denunciantes de Fernando Bécquer. También para las personas que decimos #YoSíLesCreo, claro que les creo porque las redes de apoyo son vitales. Exijo transparencia en y a partir de este MeToo para y por la sociedad cubana, por las mujeres y las niñas”, agregó.
De igual modo, exigió públicamente a Fernando Bécquer que dejara de escribirle “por privado”. “Te he etiquetado y etiquetaría, si fuera posible, porque es justo que sepas que ellas no están solas. No estamos solas. De eso se trata el movimiento MeToo. Lo que tengas que decirme a mí que sea en público”, concluyó.
Según contaron las presuntas víctimas en un reportaje publicado en diciembre, el trovador elegía muchachas jóvenes y les proponía hacerles una “limpieza”, especie de ritual religioso para supuestamente liberar de malas energías. Los hechos acontecían en su propia casa del Vedado, en La Habana.
De momento, el trovador no ha admitido culpabilidad alguna. Durante un concierto a poco de la publicación de las denuncias, negó las acusaciones. “Yo no creo nada, yo creo en la Revolución”, dijo entonces, refiriéndose a los testimonios como una “calumnia”.
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