Durante la madrugada de este martes, los residentes del reparto Pastorita, en Santiago de Cuba, despertaron alarmados tras conocer sobre un robo perpetrado en la tienda local del barrio. El hecho ha generado una ola de indignación, no solo por el delito en sí, sino por la pasividad de las autoridades ante un crimen con evidencias visibles.

Según testigos del suceso, el presunto ladrón ingresó al establecimiento rompiendo una ventana lateral. Una vez dentro, comenzó a llenar un bolso con productos —entre ellos varias compotas— pero fue sorprendido por el custodio de turno. El delincuente, al notar la presencia del vigilante, escapó apresuradamente por la puerta principal, rompiendo un cristal en su intento de fuga.

Lo más llamativo, según relatan los vecinos, es que en el interior de la tienda quedó un bolso con los artículos robados y un par de chancletas que el presunto ladrón dejó atrás. Incluso se observaban manchas de sangre en el suelo, probablemente debido a cortes sufridos en los pies descalzos del fugitivo.

Lo insólito, y lo que más preocupa a los habitantes de Pastorita, es la demora de la policía. Pasadas varias horas del incidente, no se había presentado ninguna patrulla oficial en el lugar de los hechos. “Solo vino alguien que se llevó las chancletas, pero las demás evidencias siguen ahí”, afirmó una vecina que prefirió no revelar su nombre.

De manera extraoficial, se conoció que el presunto autor del robo ya habría sido capturado, sin embargo, hasta la mañana de hoy no se han recogido huellas ni se han tomado las pruebas físicas en la escena. Esta omisión levanta críticas generalizadas sobre la eficacia del sistema de respuesta ante delitos comunes.

Los vecinos exigen mayor seriedad por parte de las autoridades locales ya que consideran que este tipo de incidentes contribuye al deterioro de la seguridad ciudadana y a una creciente sensación de impunidad. “Si no actúan rápido en algo tan evidente ¿qué podemos esperar en casos más graves?”, cuestionó otro residente.

La comunidad espera que este incidente sirva como llamado de atención a las fuerzas del orden en Santiago de Cuba y se reevalúe la manera en que se manejan los crímenes que afectan directamente al pueblo trabajador.

Fuente: Yosmany Mayeta

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