Profesores cubanos niegan privatización de economía en la isla mediante mipymes
Redacción de CubitaNOW ~ viernes 30 de junio de 2023

Dos profesores del Centro de Estudios de la Economía Cubana, negaron en declaraciones a la prensa oficialista que en el país se estuviera produciendo una privatización de la economía con el escenario actual de las micro, pequeñas y medianas empresas, conocidas como mipymes.
“En América Latina y Europa las MIPYMES representan aproximadamente el 98% del total de empresas, sin embargo, el 2% restante garantiza más del 80% del PIB y la mayoría de las exportaciones”, argumentó Ileana Díaz Fernández en una entrevista para Cubadebate.
“En Cuba las MIPYMES son alrededor del 50% (sin contar al trabajo por cuenta propia que contrata hasta 3 trabajadores o el negocio familiar) del total de organizaciones productivas, sin contar las unidades presupuestadas de tratamiento especial, ni las empresas mixtas”, señaló.
El gobierno cubano espera que las formas de gestión no estatal aporten el 13,9% del PIB, pero que la contribución de las entidades estatales mantenga la mayor proporción. Díaz resaltó que en la legislación vigente los medios fundamentales de producción no pueden ser propiedad privada, por tanto, no puede afirmarse que se está privatizando la economía.
“El socialismo no está reñido con la economía mixta, es decir, la existencia de diferentes formas de propiedad Es pertinente que, en vez de marginalizarlos, se les involucre en la construcción del socialismo, se fomente la articulación con formas estatales. Los actores no estatales aportan hoy a la sostenibilidad económica y social de nuestro socialismo, pero es el sector estatal quien debe fortalecerse para conducirlo”, abundó.
Por su parte, Ricardo González Águila, comentó: “Respeto a quienes piensan de esa forma, pero es una opinión que no comparto”. “Vayamos por partes, conceptualmente hablando, la privatización se asocia al traspaso de propiedad de un activo público a empresas privadas; o a la externalización de la gestión de ciertos servicios ofertados por el Estado, por ejemplo, de salud pública”, amplió.
“Hasta donde yo entiendo, esto no fue lo que sucedió en Cuba. Lo que sí ha ido pasando en Cuba –y en mi opinión de forma correcta- ha sido la superación paulatina de aquel paradigma conceptual que nos decía que el progreso social era solo posible mediante el uso exclusivo de empresas estatales. Y, como consecuencia de ese cambio de paradigma, hubo una apertura al sector privado, que yo calificaría aún hoy de discreta. No obstante, insisto en la siguiente idea, que el modelo productivo incorpore actores privados no es equiparable a privatizar”, agregó.
“De otra parte, que el número de PYMES sea mayor que el número de empresas estatales no guarda ningún significado especial. Te diría que en todos los demás indicadores (número de empleados promedios, exportación, ventas, activos físicos, etc.) la empresa estatal supera con creces al sector privado. Pero incluso si esa relación comenzara a cambiar, tampoco debería ser motivo de preocupación”, explicó.
“Al final, lo verdaderamente importante es la capacidad institucional de un Estado (en este caso el cubano) de liderar, diseñar y coordinar el desarrollo de un país donde inevitablemente deberán integrarse y cooperar diferentes actores, estatales y privados. Ahí están las referencias conceptuales de China y Vietnam, ambos países con un sector privado vibrante que ha servido para elevar la calidad de vida de su población; y no para destruir su modelo de sociedad. Fue así porque el Estado no abdicó su función como estratega de la transformación, como regulador y como diseñador y promotor de políticas públicas. Mientras Cuba no pierda esa capacidad, en mi opinión, habrá poco de qué preocuparse”, sentenció.