Una mujer de Kentucky enfrenta cargos por daños a la propiedad luego de ser acusada de destruir el automóvil de su exnovio, un incidente que no solo dejó pérdidas superiores a los 12,000 dólares, sino que además se volvió viral por la inusual sonrisa que mostró en su foto policial.

La acusada fue identificada como Stephanie Carlquist, de 31 años, quien actualmente está embarazada. De acuerdo con una denuncia penal citada por Fox News, los hechos ocurrieron entre el 6 y el 20 de julio, cuando la mujer presuntamente causó múltiples destrozos en el vehículo de su expareja, el cual también estaba a nombre de la madre del hombre.

Según el reporte, Carlquist habría vertido sal en el motor, arrojado brillantina en las rejillas de ventilación, cortado un neumático, roto el espejo retrovisor y el parabrisas, además de destruir la pantalla de la radio. La magnitud de los daños llevó a un taller de Goodyear a declarar el vehículo como pérdida total.

En un correo electrónico enviado a la madre de su expareja, Carlquist reconoció haber participado parcialmente en los hechos. “Lo único que hice fue poner brillantina en las rejillas de ventilación y dañar el parabrisas. Ah, y la llanta”, escribió, aunque negó haber dañado el motor.

La mujer justificó sus acciones asegurando que atravesaba un periodo de fuerte estrés y afirmó estar dispuesta a pagar los daños e incluso entregar su propio auto como compensación. Sin embargo, la magnitud del caso derivó en una acusación formal por daños a la propiedad en primer grado, un delito grave en el estado de Kentucky.

El padre de la acusada trató de intervenir para evitar que el caso llegara a instancias judiciales. En un mensaje de texto enviado al exnovio de su hija, le sugirió buscar un acuerdo alternativo: “Está seguro de que pueden llegar a una mejor solución que Stephanie acepte un cargo por delito grave, para que nadie salga lastimado nunca más”, señalaba el mensaje.

Carlquist fue arrestada y posteriormente liberada tras pagar una fianza de 12,000 dólares. Ahora espera la próxima audiencia en la que se determinará su situación legal.

Mientras tanto, la imagen de la mujer en su fotografía policial —posando con una sonrisa— se viralizó rápidamente en redes sociales, generando todo tipo de reacciones. Algunos usuarios ironizaron sobre la aparente despreocupación de la acusada, mientras otros criticaron la banalización de un delito que dejó pérdidas significativas y podría tener consecuencias legales graves.

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