¡La fe también cotiza: casas de apuestas hacen negocio con la sucesión papal!
Redacción de CubitaNOW ~ viernes 2 de mayo de 2025

El fallecimiento del papa Francisco a los 88 años ha reactivado una extraña fiebre: la de apostar quién será su sucesor. Apenas unas horas después de su muerte, las principales casas de apuestas del mundo —William Hill, Bet365, Paddy Power y Sportium, entre otras— abrieron mercados para predecir el nombre del próximo pontífice e incluso el nombre que adoptará al asumir el cargo.
Los principales favoritos son el italiano Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano y el cardenal filipino Luis Antonio Tagle, prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos.
En Sportium, Parolin lidera con una cuota de 2,75 euros por cada euro apostado, seguido por Tagle con 3,20. Otros candidatos con cuotas más altas incluyen al ghanés Peter Turkson, el húngaro Peter Erdo y el italiano Matteo Zuppi.
Al margen de quién ocupará el trono de San Pedro, también se puede apostar por el nombre papal. William Hill, por ejemplo, ofrece cuotas para nombres como Francisco (2,50), Benedicto (4), Juan Pablo (6) y León (8), evidenciando que hasta la tradición milenaria puede ser objeto de especulación moderna.
Aunque esta práctica se populariza en Europa, no todos pueden participar. La Asociación Americana de Juego (AGA) reiteró que en Estados Unidos está prohibido apostar sobre la elección de un papa, incluso en Nevada, cuna de Las Vegas. "No es legal apostar por el nuevo papa en EE. UU., ni siquiera en las casas de apuestas deportivas autorizadas", declaró Holly Wetzel, portavoz de la AGA.
Este fenómeno ilustra cómo la lógica del mercado y el entretenimiento digital han invadido incluso los espacios más sagrados. La sucesión papal, un evento profundamente espiritual para millones de fieles, se convierte también en un espectáculo global donde la fe y el juego se entrecruzan.
Con el cónclave previsto para comenzar a partir del 5 de mayo, la Iglesia se prepara para elegir a su nuevo líder. Pero mientras los cardenales oran y deliberan, en internet se multiplican las quinielas y las cuotas. Porque, hoy, hasta con la elección del papa… se juega.