Familia cubana en Florida lucha contra la deportación de un padre mientras su hija necesita cirugía cardíaca
Redacción de CubitaNOW ~ jueves 21 de agosto de 2025

Una familia cubana residente en Orlando atraviesa momentos de angustia tras recibir una orden de deportación contra Deivy Alemán Oropesa, quien lleva siete años en Estados Unidos trabajando, pagando impuestos y sin antecedentes criminales. La medida de inmigración amenaza con separar al padre de su hija menor, nacida en territorio estadounidense y con una delicada condición de salud.
La esposa de Alemán, Yisel Miguel Sarduy, ciudadana norteamericana, advirtió que la decisión pone en riesgo la estabilidad del hogar. La niña de dos años ha sido sometida ya a dos cirugías a corazón abierto y los médicos prevén una tercera antes de que cumpla cinco años.
“Mi esposo siempre ha cumplido con sus citas y con la ley. Ahora quieren apartarlo de su hija cuando más lo necesita. No sé cómo enfrentar esta situación sola”, declaró Sarduy.
Alemán relató que cada año asistía puntualmente a sus encuentros con las autoridades migratorias sin mayores complicaciones. Sin embargo, en la cita más reciente, oficiales del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) le colocaron un grillete electrónico y le dieron 14 días para abandonar el país voluntariamente, o de lo contrario enfrentar la detención y deportación inmediata.
“Lo que más me preocupa es mi hija. No quiero que pase por otra cirugía sin mí. Solo pido que me dejen quedarme y seguir cuidando a mi familia”, afirmó en entrevista con Telemundo 51.
La abogada de inmigración Rosaly Chaviano, quien revisó el caso, explicó que Alemán recibió un I-220B, documento que se aplica a personas con orden final de deportación. “Lo que ICE solicita en estos casos es una prueba de salida, como un boleto de avión. Aunque existen alternativas legales, la realidad es que hoy los factores humanitarios casi no se consideran”, señaló.
Chaviano aclaró que el matrimonio con una ciudadana estadounidense y la condición médica de la niña son puntos a favor en un proceso judicial, pero no garantizan detener la deportación. La estrategia más viable sería presentar de inmediato una moción para reabrir el caso en la corte de inmigración.
La madre insiste en que regresar a Cuba no es una opción, pues las limitaciones del sistema de salud pondrían en grave peligro la vida de la niña. “Tenemos cartas de cardiólogos y pediatras que avalan la urgencia de su tratamiento aquí. Solo pedimos la oportunidad de mantener unida a nuestra familia y darle a nuestra hija la atención médica que requiere”, subrayó.
La familia espera ahora que congresistas o senadores puedan intervenir antes de que se cumpla el plazo impuesto por ICE. Mientras tanto, Alemán sigue con el temor de que cada día lo acerque más a ser deportado, justo cuando su presencia es vital para la recuperación de su hija.