El emblemático hotel Mandarin Oriental de Miami ha cerrado sus puertas tras 25 años de historia para dar paso a un ambicioso desarrollo inmobiliario de mil millones de dólares. En su lugar se levantará The Residences at Mandarin Oriental, un proyecto de dos torres que combinará residencias privadas y un nuevo hotel de lujo, consolidando a Brickell como uno de los puntos más codiciados del mercado de bienes raíces de alto nivel en Estados Unidos.

El proyecto es liderado por Mandarin Oriental, Swire Properties y Fortune Development Sales, e incluirá apartamentos con precios que oscilan entre 4.9 y 100 millones de dólares. Según los promotores, ya se ha vendido el 50 % de la Torre Sur, lo que evidencia el fuerte interés por estas exclusivas propiedades.

Uno de los mercados que ha mostrado mayor interés en el proyecto es el español. Las compañías promotoras han señalado que España ha sido una “parada prioritaria” en la promoción del desarrollo, debido al “fuerte vínculo con la marca Mandarin Oriental”. De hecho, se ha destacado que el mercado español ha sido el más activo de Europa en la adquisición de estas residencias.

“La conexión entre el servicio asiático y el estilo de vida mediterráneo ha sido una apuesta estratégica para atraer a compradores sofisticados, globales y exigentes”, aseguraron los desarrolladores en un comunicado.

El complejo ocupará 20,000 metros cuadrados, con más de 9,300 dedicados a comodidades de lujo. Entre ellas se incluyen 11 piscinas, jardines de meditación, áreas de bienestar con tratamientos holísticos, una vinoteca privada, simuladores de golf y dos restaurantes de alta cocina.

La Torre Sur albergará 228 residencias de dos a cinco habitaciones, con espacios que van desde los 217 hasta los 725 metros cuadrados. La Torre Norte, por su parte, contará con 28 residencias tipo hotel y 66 residencias privadas. Además, se construirá un nuevo hotel Mandarin Oriental de 121 habitaciones, que se espera se convierta en la propiedad insignia de la marca en América del Norte.

Este megaproyecto refleja el auge que ha experimentado el mercado inmobiliario de Miami desde la pandemia de 2020, cuando miles de personas de otros estados se mudaron a Florida en busca de mayor libertad sanitaria, clima cálido y precios más accesibles. Desde entonces, la demanda de propiedades en zonas como Brickell se ha disparado.

Según la Asociación de Vendedores de Bienes Raíces de Miami, el condado de Miami-Dade es actualmente el segundo mayor mercado de vivienda del país, con un incremento del 141 % en los precios de los condominios en la última década.

Fuente: EFE

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