El mercado informal de divisas en Cuba continúa mostrando movimientos inesperados: el dólar estadounidense encadena cinco días consecutivos de caída, y este domingo 2 de noviembre se cotiza a 450 CUP, diez pesos menos que la jornada anterior.
El euro también sufre una fuerte baja, descendiendo a 510 CUP, lo que representa una caída de 15 pesos respecto a este sábado. Mientras tanto, la moneda virtual del régimen, la MLC, se mantiene estable en 205 CUP por unidad.
Estos cambios se producen en un contexto de creciente tensión política y económica. En las últimas horas, el medio independiente elTOQUE ha salido al paso de las acusaciones de Sandro Castro, quien aseguró que la plataforma “inflaba artificialmente” la tasa del dólar para obtener beneficios económicos.
ElTOQUE desmintió estas afirmaciones, señalando que su labor es simplemente reflejar el comportamiento real del mercado con datos verificados, y no intervenir en él. Según la plataforma, algunos empresarios cubanos, entre ellos Sandro Castro, son los verdaderos actores que influyen en la cotización del dólar de manera informal.
La situación ha despertado también la atención del gobierno. El canciller Bruno Rodríguez atribuyó la caída de las divisas a una supuesta campaña desde Estados Unidos destinada a “desestabilizar” la economía cubana, mediante especulación cambiaria, manipulación psicológica y financiamiento ilícito. Sin embargo, el mercado informal sigue su curso y los cubanos continúan observando de cerca la evolución de las tasas.
A pesar de los anuncios del primer ministro Manuel Marrero sobre la “tasa flotante” a finales de 2024, que buscaba acercar los valores oficiales a los del mercado informal, aún no se conocen cambios concretos que hayan impactado de manera significativa en la cotización de las divisas. Por ahora, los cubanos enfrentan un escenario donde el dólar y el euro fluctúan día a día, afectando directamente su capacidad de compra y sus decisiones financieras.
La caída de estas divisas representa un respiro para algunos sectores de la población, pero también deja en evidencia la fragilidad y la especulación persistente en el mercado paralelo. Mientras elTOQUE mantiene su compromiso de publicar datos verificados, la economía informal de Cuba sigue siendo un terreno donde los cubanos deben navegar con cautela entre la incertidumbre y las oportunidades.